Por Ana Mano y Leticia Fucuchima
SAO PAULO, 20 ene (Reuters) – Una ley aprobada por los legisladores de Mato Grosso, el mayor estado agrícola de Brasil, que cambia la clasificación de los biomas en peligro dentro de las fronteras del estado, probablemente debilitará las protecciones medioambientales allí, según los activistas climáticos.
Según la nueva ley, las zonas situadas actualmente en el bioma amazónico podrían convertirse en zonas de sabana en función de la altura de los árboles.
Esto significa que las propiedades de Mato Grosso situadas en el bioma amazónico, que deben conservar un 80% de vegetación autóctona según el Código Forestal de Brasil, podrían convertirse en zonas de sabana, que deben preservar un 35% mucho menor.
La medida, aprobada en los primeros días de enero, es el último revés medioambiental en Mato Grosso, que produce casi tanta soja como Argentina y casi una cuarta parte de las exportaciones brasileñas de carne fresca.
Suely Araujo, coordinadora de políticas públicas del Observatorio del Clima, calificó la ley de inconstitucional en una entrevista el lunes, porque entra en conflicto con los estatutos federales. Dijo que podría ser impugnada en los tribunales.
“La nueva legislación podría causar un aumento de la deforestación estimado en 5,2 millones de hectáreas, un área del tamaño de Costa Rica”, dijo en un comunicado el Instituto de Investigación Ambiental de la Amazonia (IPAM).
La oficina del gobernador Mauro Mendes, que aún tiene que firmar el proyecto de ley, dijo que había propuesto algo totalmente diferente del texto aprobado por la legislatura estatal. Se negó a comentar un posible veto, diciendo que el proyecto de ley está siendo analizado por los abogados del poder ejecutivo.
Aumenta la presión de los grupos agrarios para que se abran más zonas a proyectos agrícolas a gran escala.
Como respuesta, Mato Grosso aprobó recientemente una ley que elimina las exenciones fiscales para los comerciantes de grano que apliquen la “moratoria de la soja”, un acuerdo voluntario por el que los exportadores prohíben a los agricultores que cultiven soja en una zona deforestada después de 2008.
El mes que viene, el Tribunal Supremo se pronunciará sobre la constitucionalidad de dicha ley.
(Reportaje de Ana Mano y Leticia Fucuchima; Editado en español por Juana Casas)