MELBOURNE, 21 ene (Reuters) – Alexander Zverev jugó su mejor tenis cuando más importaba y consiguió derrotar a Tommy Paul 7-6(1) 7-6(0) 2-6 6-1 el martes y alcanzar su tercera semifinal del Abierto de Australia en cinco años, manteniendo vivo su sueño de conseguir finalmente un título de Grand Slam.
El alemán, de 27 años, fue incapaz de encontrar su mejor nivel durante la mayor parte del partido, disputado bajo un sofocante calor vespertino en la Rod Laver Arena, pero dominó a su rival estadounidense en los juego decisivos y se adjudicó los dos primeros sets.
Paul se hizo con el tercer set, pero Zverev, segundo cabeza de serie, subió su intensidad para imponerse en el cuarto y citarse con el ganador del choque entre Novak Djokovic y Carlos Alcaraz.
“Para ser honesto, debería haber perdido dos sets, él los jugó mejor. Yo no estaba jugando muy bien”, dijo Zverev tras alcanzar su novena semifinal de Grand Slam, el mayor número de semifinales entre jugadores en activo que no han ganado un Grand Slam.
“De alguna manera, estoy dos sets arriba y de repente solo necesito uno más, y el cuarto set ha sido sin duda el mejor que he jugado”.
“Estoy muy feliz de volver a las semifinales”.
Paul, que tiene también 27 años, había derrotado a Zverev en sus dos enfrentamientos anteriores y trabajó asiduamente para ganar la ventaja en los dos primeros sets, pero el alemán subió una marcha y lo arrastró de nuevo a una pelea a cara de perro.
El semifinalista de 2023 convirtió su cuarto punto de quiebre para tomar una ventaja de 6-5 en el set inicial, pero Zverev le devolvió el favor en el siguiente juego antes de apabullar en el juego deciviso por 7-1.
Paul rompió de nuevo al principio del segundo set con un tiro pasante de revés mientras Zverev cargaba la red y esta vez pudo consolidar una ventaja de 3-0.
Zverev tuvo puntos de ruptura en el 4-2 y se enfadó con el árbitro Nacho Forcadell, que ya le había sancionado con una violación del código por una obscenidad audible, después de que en un punto de iguales se señalara una repetición del servicio al caer una pluma a la pista.
Paul aguantó, pero Zverev, enrabietado, le rompió el saque en su siguiente juego de servicio y puso el set en 5-4 con el servicio a favor. El alemán evitó otro punto de rotura y mantuvo el 5-5 antes de negar al 12º cabeza de serie un solo punto en la muerte súbita.
Zverev cedió su primer juego de servicio en la tercera manga y Paul dobló su ventaja cuando logró un golpe ganador de derecha y se puso con 5-2 antes de mantener el saque para sentenciar el set.
Sin embargo, para el estadounidense fue una falsa esperanza, y el último set fue cuesta arriba para Paul, que no consiguió ganar un juego hasta que estuvo 5-0 abajo, y eso solo después de cuatro empates a cuarenta.
(Información de Nick Mulvenney, edición de Peter Rutherford; edición en español de Javi West Larrañaga)
