Por Stefano Rebaudo
30 ene (Reuters) – Los rendimientos de la zona euro caían el jueves ante la debilidad de los datos económicos, mientras los inversores esperaban la reunión de política monetaria del Banco Central Europeo, en la que se espera que se recorten los tipos en 25 puntos básicos y se mantenga la puerta abierta a una mayor relajación de la política monetaria.
La economía alemana se contrajo más de lo previsto en el último trimestre del año pasado, lo que avivó los temores de recesión.
Es probable que la presidenta del BCE, Christine Lagarde, argumente que la dirección de la política monetaria sigue siendo clara y que el riesgo de una guerra comercial con Estados Unidos podría minar aún más el débil crecimiento.
El rendimiento del bono alemán a 10 años, la referencia de la zona euro, caía 4,5 puntos básicos (pb), hasta el 2,53%.
El rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años descendía 5 puntos básicos, hasta el 4,51%, en las primeras operaciones de Londres. El miércoles revirtieron una subida anterior después de que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijera que espera ver nuevos avances en materia de inflación.
Los mercados monetarios valoraban en un 95% la posibilidad de un recorte de tipos del BCE de 25 puntos básicos el jueves [IRPR] y un tipo de la facilidad de depósito del 2,1% a finales de 2025 desde el actual 3%.
El rendimiento de los bonos alemanes a dos años, más sensible a las expectativas de tipos del BCE, bajaba 4,5 puntos básicos, hasta el 2,23%.
El rendimiento de los bonos italianos a 10 años retrocedía 4 puntos básicos, hasta el 3,62%.
La brecha entre los rendimientos italiano y alemán, un indicador de mercado de la prima de riesgo que exigen los inversores por mantener deuda italiana, se ampliaba a 108 puntos básicos, pero no estaba lejos de su nivel más bajo desde octubre de 2021, en 104,50 puntos básicos.
La economía italiana se estancó en el cuarto trimestre, ensombreciendo las perspectivas para este año.
Analistas señalan que el descenso de los tipos de interés oficiales del BCE apoyará la demanda de BTP por parte de los inversores deseosos de asegurarse una alta rentabilidad.
Michael Leister, estratega de Commerzbank, afirmó que esta “euforia del BCE” se ha desvanecido, pero la reducción de la volatilidad debería impulsar el apetito por el “carry trade”, apoyando los diferenciales.
El “carry trade” es una estrategia por la que los inversores piden dinero prestado en un mercado de tipos bajos e invierten en una divisa o activo de mayor rentabilidad.
El diferencial de rendimiento entre los OAT y los “bunds” se situaba en 74 puntos básicos, en un momento en que un pequeño grupo de senadores y diputados franceses se reúne el jueves para debatir el texto final de un presupuesto para 2025 muy retrasado, después de que las conversaciones estuvieran al borde del colapso el miércoles.
El diferencial se amplió hasta alrededor de 90 puntos básicos, su nivel más alto desde 2012, a mediados de enero y finales de noviembre, en un escenario de preocupación de que Francia tuviera dificultades para recortar su creciente déficit presupuestario.
Una reconciliación entre los partidos políticos todavía podría suceder, “pero reduce la estabilidad de este Gobierno”, dijo Citi en una nota de análisis.
“En general, sin embargo, no vemos esto como un desarrollo significativo dado que las elecciones anticipadas siguen siendo probables en el tercer trimestre y el presupuesto de 2025 es quizás la única legislación significativa antes de eso”.
La actividad económica de Francia retrocedió ligeramente en el cuarto trimestre, a pesar de la firmeza del gasto de los consumidores, al disminuir el impulso de los Juegos Olímpicos de París 2024.
(Información de Stefano Rebaudo; edición de Bernadette Baum; edición en español de María Bayarri Cárdenas)