Por Nidal al-Mughrabi y Alexander Cornwell
EL CAIRO/JERUSALÉN, 11 feb (Reuters) -El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo el martes que si Hamás no libera a los rehenes israelíes antes del mediodía del sábado, el frágil alto el fuego en Gaza terminaría y el ejército israelí reanudaría su ofensiva en el enclave palestino hasta que el grupo militante sea derrotado.
“A la luz del anuncio de Hamás sobre su decisión de violar el acuerdo y no liberar a nuestros rehenes, anoche ordené a las FDI que reúnan fuerzas dentro y alrededor de la Franja de Gaza”, dijo Netanyahu, hablando después de una reunión de su gabinete de seguridad.
“La operación se está llevando a cabo en este momento y se completará en un futuro muy próximo”, indicó en un comunicado.
Hamás comenzó a liberar gradualmente a algunos rehenes tras el alto el fuego en vigor desde el 19 de enero, pero ha pospuesto la liberación de más rehenes hasta nuevo aviso, luego de acusar a Israel de violar los términos al continuar los ataques contra la Franja de Gaza y retrasar la entrega de ayuda.
Trump, estrecho aliado de Israel, dijo el lunes que Hamás debía liberar a todos los rehenes en su poder antes del mediodía del sábado o propondría cancelar el alto el fuego entre Israel y Hamás, que se inició el 19 de enero.
“Si Hamás no devuelve a nuestros rehenes antes del mediodía del sábado, el alto el fuego terminará y las FDI (los militares) volverán a combatir intensamente hasta que Hamás sea finalmente derrotado”, dijo Netanyahu.
No quedó inmediatamente claro si se refería al regreso de los rehenes que deberían ser liberados el sábado o todos los que aún están detenidos en el enclave palestino.
Un funcionario de Hamás dijo el martes que los rehenes israelíes podrían regresar a casa solo si se respetaba el alto el fuego, desestimando el “lenguaje de las amenazas” después de que Trump dijo que “dejaría que se desatara el infierno” si no eran liberados.
“Trump debe recordar que hay un acuerdo que debe respetarse por ambas partes, y esta es la única manera de traer de vuelta a los prisioneros (israelíes). El lenguaje de las amenazas no tiene ningún valor y sólo complica las cosas”, dijo a Reuters el portavoz de Hamás, Sami Abu Zuhri.
Israel niega estar reteniendo suministros de ayuda y dice que ha disparado contra personas que ignoran las advertencias de no acercarse a las posiciones de las tropas israelíes.
Netanyahu había prometido que Israel garantizaría el regreso de todos sus rehenes.
“Seguiremos tomando medidas decididas y despiadadas hasta que devolvamos a todos nuestros rehenes, los vivos y los muertos”, dijo tras la confirmación de la muerte de otro israelí durante el ataque liderado por Hamás que inició la guerra de Gaza hace 16 meses.
GABINETE DE SEGURIDAD
Un funcionario israelí, bajo condición de anonimato, dijo que el primer ministro se reunió el martes con el gabinete de seguridad, un grupo selecto de ministros, durante casi cuatro horas.
Gaza, una de las zonas más densamente pobladas del mundo, ha sido devastada por la ofensiva militar de Israel desde octubre de 2023 y padece escasez de alimentos, agua y refugio y necesita miles de millones de dólares en ayuda extranjera.
Trump ha enfurecido a los dirigentes palestinos y árabes y ha echado por tierra décadas de políticas estadounidenses que respaldaban una posible solución de dos Estados en la región al tratar de imponer su visión de Gaza.
Ha dicho que Estados Unidos debería tomar el control de Gaza, donde muchas casas se han convertido en montones de cemento, polvo y metal retorcido tras meses de guerra, y desalojar a sus más de 2 millones de residentes para que el enclave palestino se convierta en la “Riviera de Oriente Próximo”.
El desplazamiento forzoso de una población bajo ocupación militar es un crimen de guerra prohibido por las convenciones de Ginebra de 1949.
La guerra de Gaza, que se desencadenó tras los ataques de Hamás contra territorio israelí el 7 de octubre de 2023, está en pausa desde mediados de enero por el acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás en el que mediaron Qatar, Egipto y Estados Unidos.
Más de 48.000 palestinos han muerto en los últimos 16 meses, según el Ministerio de Sanidad de Gaza, y casi toda la población de Gaza se ha desplazado internamente por el conflicto, que ha provocado una crisis de hambre.
Unas 1.200 personas murieron en los ataques de 2023 dirigidos por Hamás contra comunidades del sur de Israel y unas 250 fueron llevadas a Gaza como rehenes, según los recuentos israelíes.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, dijo el martes en X que debía evitarse a toda costa una reanudación de las hostilidades porque ello provocaría una “inmensa tragedia”.
(Información de Nidal al Mughrabi; redacción de Michael Georgy; edición de Peter Graff y Timothy Heritage; edición en español de María Bayarri Cárdenas)