Por Leika Kihara y Makiko Yamazaki
4 mar (Reuters) – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo a los líderes de Japón y China que no podían seguir reduciendo el valor de sus monedas, ya que hacerlo sería injusto para EEUU.
Subrayando el riesgo al que se enfrenta la economía japonesa, dependiente de las exportaciones, por la incertidumbre sobre las políticas monetarias y arancelarias de Washington, el índice de referencia Nikkei caía casi un 2% el martes, ya que los comentarios de Trump hicieron subir al yen.
El yen subía brevemente a 148,60 por dólar el martes, frente a los 150 del lunes.
“He llamado al presidente Xi, he llamado a los líderes de Japón para decirles que no pueden seguir reduciendo y debilitando su moneda”, dijo Trump en la Casa Blanca el lunes.
“No pueden hacerlo porque es injusto para nosotros. Es muy difícil para nosotros fabricar tractores, Caterpillar aquí, cuando Japón, China y otros lugares están matando su moneda, es decir, haciéndola caer”, dijo.
En lugar de quejarse repetidamente por teléfono por esos intentos, Estados Unidos podría compensar la desventaja que sufren sus fabricantes imponiendo aranceles, añadió Trump.
“Así que todas estas cosas se suman”, dijo. “Y la forma de resolverlo muy fácilmente es con aranceles”.
Tokio no estaba adoptando políticas directamente dirigidas a debilitar el yen, dijo el ministro japonés de Finanzas, Katsunobu Kato, al ser preguntado por los comentarios de Trump.
“Japón ha confirmado su postura básica sobre la política monetaria” con los países del G7 y Estados Unidos, incluso en las conversaciones bidireccionales con el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, el 29 de enero, dijo Kato en una conferencia de prensa en Tokio el martes.
El primer ministro, Shigeru Ishiba, también dijo ante el Parlamento que Japón no persigue una “política de devaluación de la moneda” y añadió que no ha recibido ninguna llamada telefónica de Trump sobre la política cambiaria.
Los dirigentes monetarios japoneses se han mostrado sensibles al riesgo de que Trump haga comentarios explícitos sobre el yen y provoque una volatilidad en los mercados que podría perjudicar la frágil recuperación económica.
El mes pasado, Ishiba dijo que estaba de acuerdo con Trump en que los dos países dejarían los asuntos relacionados con los tipos de cambio en manos de sus ministros de Finanzas.
(Información de Leika Kihara y Makiko Yamazaki; información adicional de Yoshifumi Takemoto; edición de Nia Williams, Christopher Cushing y Lincoln Feast; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)