(Corrige titular y aclara en el primer párrafo que la decisión fue del Tribunal Constitucional, no del Tribunal Supremo)
MADRID, 13 mar (Reuters) -El Tribunal Constitucional de España respaldó el jueves el plan de Barcelona de prohibir el alquiler de apartamentos vacacionales para 2028, rechazando un recurso que argumentaba que la medida vulneraba los derechos de los propietarios privados.
Barcelona ha sido la primera ciudad española en adoptar la decisión radical de cerrar todos los alquileres de corta duración para hacer frente al aumento de los alquileres.
Tras la sentencia judicial, las autoridades locales de Barcelona dijeron que no renovarán las licencias turísticas para alquileres de corta duración después de 2028.
“Esta es una magnífica noticia en favor del derecho a la vivienda”, dijo a la prensa el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni. “Vamos en el camino correcto.”
España es el segundo país más visitado del mundo después de Francia, con un récord de 94 millones de visitantes el año pasado. El país se debate entre el mantenimiento del turismo, uno de los principales motores de su economía, y las necesidades de la población residente, que afirma estar siendo excluida del mercado inmobiliario por los visitantes adinerados.
En junio, Collboni dijo que suprimiría las licencias de más de 10.000 apartamentos de alquiler a corto plazo, basando su plan en un decreto regional sobre vivienda aprobado en 2023 que permite a los municipios decidir si incluyen los pisos de vacaciones en sus permisos urbanísticos.
El tribunal afirma que el decreto regional de alquileres turísticos no constituye una supresión del derecho de propiedad.
Airbnb ha instado a Collboni a reconsiderar sus medidas enérgicas contra los alquileres de corta duración, argumentando que solo sirven para beneficiar al sector hotelero.
La Asociación Europea de Viviendas Vacacionales, que representa a los alquileres de corta duración en plataformas en línea como Airbnb, también presentó una denuncia ante la Comisión Europea contra la región de Cataluña, donde se encuentra Barcelona, por permitir que las ciudades prohíban este tipo de alquileres.
Otras regiones españolas, como las islas Canarias, están poniendo límites al mercado del alquiler a corto plazo para contener el aumento de los precios de la vivienda.
Barcelona pretende apoyar la creación de nuevas plazas hoteleras para ofrecer alojamiento turístico en zonas fuera del centro de la ciudad una vez que entre en vigor la prohibición de alquilar apartamentos turísticos a turistas.
(Información de Corina Pons en Madrid y Joan Faus en Barcelona; edición de Charlie Devereux y Nia Williams; editado en español por Tomás Cobos)