FRÁNCFORT, 20 mar (Reuters) – La dependencia de Europa de los proveedores de pagos estadounidenses la deja expuesta a la coerción económica, lo que debilita su autonomía y refuerza los argumentos a favor de un euro digital, dijo el jueves el economista jefe del BCE, Philip Lane.
«Esta dependencia expone a Europa a riesgos de presión y coerción económicas y tiene implicaciones para nuestra autonomía estratégica que limitan nuestra capacidad para controlar aspectos críticos de nuestra infraestructura financiera», dijo Lane en Cork, Irlanda.
«El euro digital no consiste sólo en asegurarnos de que nuestro sistema monetario se adapte a la era digital», dijo Lane. «Se trata de garantizar que Europa controle su destino monetario y financiero, en un contexto de creciente fragmentación geopolítica».
(Información de Balazs Koranyi; edición de Louise Heavens; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)