Por Elizabeth Pineau y Juliette Jabkhiro
PARÍS, 31 mar (Reuters) -La líder francesa de ultraderecha Marine Le Pen fue condenada el lunes por malversación de fondos e inhabilitada durante cinco años con efecto inmediato para presentarse a cargos públicos, en un momento decisivo que la dejará fuera de las elecciones presidenciales de 2027 a menos que recurra antes con éxito.
La sentencia del tribunal francés ha supuesto un revés catastrófico para Le Pen, dirigente del partido de extrema derecha Reagrupamiento Nacional (RN) y favorita en las encuestas de opinión para la contienda de 2027.
La jueza ha condenado a Le Pen a cuatro años de cárcel, dos de ellos en suspenso y dos en arresto domiciliario. También se le impuso una multa de 100.000 euros (108.200 dólares).
Le Pen, de 56 años, apelará la decisión, dijo su abogado, y ni la pena de prisión ni la multa se aplicarán hasta que se agoten sus recursos. En Francia, los recursos pueden durar meses o incluso años.
No obstante, su prohibición de presentarse a las elecciones durante cinco años entra en vigor inmediatamente, a través de una medida de “ejecución provisional” solicitada por la fiscalía, que solo se levantará si se admite su recurso antes de las elecciones.
“DEMOCRACIA ASESINADA”
La mano derecha de Le Pen, el presidente de RN, Jordan Bardella, dijo: “Hoy no ha sido Marine Le Pen la única condenada injustamente: Ha sido la democracia francesa la que ha sido asesinada”.
Bardella se perfila ahora como el candidato de facto del partido para las elecciones de 2027.
Pero el legislador centrista Sacha Houlie dijo en X: “¿En qué momento pensamos que un juez no aplicará la ley? ¿Está la sociedad tan enferma que se ofende por lo que no es ni más ni menos que el Estado de Derecho?”.
Le Pen se ha presentado tres veces a las elecciones presidenciales y ha dicho que 2027 será su última candidatura. Sus esperanzas residen ahora en anular la sentencia del lunes en apelación antes de las elecciones. Los recursos en Francia pueden llevar meses o incluso años.
Le Pen, RN y una veintena de figuras del partido fueron acusados de desviar más de 4 millones de euros (4,33 millones de dólares) de fondos del Parlamento Europeo para pagar a personal afincado en Francia. No fueron acusados de embolsarse el dinero, sino de utilizar los fondos de la UE en beneficio de su partido.
Habían alegado que el dinero se utilizó legítimamente y que las acusaciones habían definido de forma demasiado restrictiva las funciones de un asistente parlamentario.
La jueza Bénédicte de Perthuis dijo que Le Pen había estado “en el corazón” de la trama. Destacó que las investigaciones “demostraron que no se trataba de errores administrativos (…) sino de malversación de fondos en el marco de un sistema establecido para reducir los costos del partido”.
Desde su primera derrota ante el presidente francés, Emmanuel Macron, en 2017, Le Pen había tratado de suavizar su imagen virando su partido hacia la corriente política dominante y esforzándose por parecer una líder a la espera en lugar de una opositora radical del poder establecido.
Actualmente preside el mayor partido de la Asamblea Nacional y conservará su escaño hasta el final de su mandato. Esto ocurrirá en 2029, a menos que se convoquen elecciones legislativas anticipadas.
(1 dólar = 0,9242 euros)
(Escrito por Gabriel Stargardter e Ingrid Melander; edición en español de María Bayarri Cárdenas, Jorge Ollero Castela y Javier Leira)