Por Lucila Sigal y Miguel Lo Bianco
BUENOS AIRES, 21 abr (Reuters) -Los argentinos amanecieron el lunes con la triste noticia de que el papa Francisco, exarzobispo de Buenos Aires, falleció en el Vaticano a los 88 años después de luchar durante meses contra una neumonía bilateral.
Hijo de inmigrantes italianos, Francisco nació en Buenos Aires como Jorge Bergoglio en 1936 y fue el primer papa latinoamericano, quien se destacó por su defensa de los pobres.
“Se nos fue el papa de los pobres, el papa de los marginales (…) El mejor homenaje que podemos hacer los argentinos a Francisco es unirnos”, dijo el lunes durante una misa por el papa Jorge García Cuerva, arzobispo de Buenos Aires, en la catedral de la ciudad, adornada con una foto de Bergoglio, flores blancas y la bandera argentina.
Milei, un excéntrico economista partidario del libre mercado, se había enfrentado anteriormente con el papa, criticándolo como socialista e incluso llamándolo el “representante del maligno en la Tierra”, aunque tendió puentes con el Vaticano una vez que asumió el cargo.
“Con profundo dolor me entero esta triste mañana que el Papa Francisco, Jorge Bergoglio, falleció hoy y ya se encuentra descansando en paz. A pesar de diferencias que hoy resultan menores, haber podido conocerlo en su bondad y sabiduría fue un verdadero honor para mí”, dijo el presidente ultraliberal argentino, Javier Milei, en un mensaje en la red social X.
La presidencia de Argentina elogió el énfasis del papa Francisco en el diálogo interreligioso, la construcción de espiritualidad entre los jóvenes y sus iniciativas para recortar costos en el Vaticano, aspecto en el que coincide con las medidas de austeridad “de motosierra” de Milei.
“Como presidente, como argentino y, fundamentalmente, como un hombre de fe, despido al Santo Padre y acompaño a todos los que hoy nos encontramos con esta triste noticia”, agregó Milei en su publicación en X, que acompañó con una foto de Francisco alzando una bandera argentina.
Milei viajaría a Roma en las próximas horas a las exequias de Bergoglio, informó una fuente del Gobierno, aunque el viaje aún no fue confirmado oficialmente.
La mayoría de los argentinos, que aún lamentan que Bergoglio nunca regresara al país como pontífice, recién se enteraron en la madrugada de la noticia, mientras se dirigían al trabajo.
“Es una pena porque peleó por un montón de derechos”, dijo Julia Castro, una empleada de 42 años en el emblemático Obelisco de Buenos Aires. “No lo puedo creer”, agregó.
Por su parte, Nicolás Córdoba, otro argentino que acababa de enterarse de la muerte de Francisco, dijo que “va a doler en el alma a la gente”.
“A mí me duele una locura, me duele mucho porque me acuerdo más que nada las palabras de él a favor de los bisexuales y homosexuales y literalmente a mí me duele”, agregó.
(Reporte de Lucila Sigal y Miguel Lo Bianco. Editado por Adam Jourdan/Nicolás Misculin)