MOSCÚ, 25 abr (Reuters) -El Kremlin culpó a Ucrania por la explosión de un coche bomba que mató el viernes a un oficial militar ruso de alto rango cerca de Moscú, horas antes de que el enviado del presidente estadounidense Donald Trump, Steve Witkoff, se reuniera con el presidente Vladimir Putin en Moscú.
No hubo ningún comentario oficial de Kiev sobre la muerte de Yaroslav Moskalik, de 59 años, el último de una serie de oficiales militares rusos y figuras pro guerra asesinados desde el comienzo de la guerra de Rusia en Ucrania.
Witkoff se reunió con Putin para discutir las propuestas estadounidenses para poner fin a la guerra, que ya lleva cuatro años.
“El régimen de Kiev demuestra una vez más su verdadera naturaleza. Sigue involucrado en actividades terroristas en nuestro país”, dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, a un periodista de la televisión estatal.
“Esto demuestra una vez más que, a pesar de las conversaciones de paz, debemos estar alerta y comprender la naturaleza de este régimen”.
El servicio de inteligencia SBU de Ucrania no respondió a una solicitud de comentarios sobre la muerte de Moskalik, quien era subjefe de la Dirección Principal de Operaciones del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia.
Ese puesto le habría otorgado un papel importante en la planificación de las operaciones militares rusas, incluso en Ucrania. Los medios estatales afirmaron que tenía el rango de teniente general.
El cuerpo de un hombre, parcialmente cubierto por una sábana blanca, yacía en la acera frente a la entrada de un edificio de apartamentos en la ciudad de Balashikha, al este de Moscú, cerca de un automóvil incendiado.
“La explosión se produjo como resultado de la detonación de un artefacto explosivo casero lleno de elementos destructivos”, dijeron los investigadores en un comunicado.
El SBU ucraniano mató al teniente general Igor Kirillov de forma similar el pasado diciembre. El enviado de Trump a Ucrania, el general Keith Kellogg, afirmó que el ataque violó las reglas de la guerra.
Los blogueros rusos de guerra describieron a Moskalik como una estrella en ascenso. Había participado en varias delegaciones rusas de alto nivel que se reunieron con funcionarios occidentales para intentar negociar una solución al conflicto en Ucrania.
También abordó el tema de Siria, presentando un informe sobre la cooperación técnico-militar en África y Oriente Medio en un foro de seguridad en Moscú en 2021.
Rybar, un bloguero de guerra ruso con más de 1,2 millones de suscriptores en Telegram, dijo que era considerado “uno de los oficiales más inteligentes y exigentes” de su dirección.
El bloguero dijo que Moskalik estaba siendo considerado para servir como jefe del Centro de Gestión de la Defensa Nacional, el centro supremo de comando y control de las Fuerzas Armadas Rusas, debido a su “enfoque sistemático y reflexión”.
(Información de Reuters en Moscú y Lucy Papachristou en Londres, Escrito por Mark Trevelyan y Lucy Papachristou; edición en español de Jorge Ollero Castela y Ricardo Figueroa)