Caída del sector manufacturero en EEUU se profundiza en abril

WASHINGTON (Reuters) – El sector manufacturero estadounidense siguió contrayéndose en abril, mientras los aranceles sobre los bienes importados tensaban las cadenas de suministro y mantenían elevados los precios pagados por los insumos.

El Instituto de Gerencia y Abastecimiento (ISM) indicó el jueves que su PMI manufacturero cayó el mes pasado a su nivel más bajo en cinco meses, a 48,7 puntos, desde los 49 de marzo. Una lectura del PMI por debajo de 50 indica contracción en el sector manufacturero, que representa el 10,2% de la economía.

Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que el PMI bajaría a 48.

La encuesta cubrió el anuncio del denominado “Día de la Liberación” por parte del presidente Donald Trump, que dio paso a aranceles radicales sobre la mayoría de las importaciones de los socios comerciales de Estados Unidos, incluido el aumento de los gravámenes sobre los productos chinos al 145%, lo que desató una guerra comercial con Pekín.

El sector manufacturero depende en gran medida de las materias primas importadas. La segunda caída mensual consecutiva del PMI puso fin a una breve recuperación que había sido impulsada por las esperanzas de un entorno regulatorio menos estricto por parte del gobierno de Trump y los recortes de tasas de interés de la Reserva Federal.

No hubo señales en la encuesta de que las fábricas siguieran adelantando importaciones el mes pasado, aunque el temor a precios más altos por los aranceles podría haber impulsado a las empresas a adelantar sus pedidos. La avalancha de importaciones lastró al Producto Interno Bruto en el primer trimestre.

El subíndice prospectivo de nuevos pedidos del ISM mejoró a 47,2 tras caer a 45,2 en marzo, que fue la lectura más baja desde mayo de 2023.

La producción de las fábricas siguió deprimida y el rendimiento de las entregas de los proveedores empeoró el mes pasado. El índice de entregas de proveedores de la encuesta aumentó a 55,2 desde 53,5 en marzo. Una lectura por encima de 50 indica una desaceleración de las entregas.

Con la ralentización de las entregas, el índice de precios pagados por los fabricantes por los insumos subió a 69,8, un máximo desde junio de 2022, desde 69,4 en marzo. Esto apunta a un repunte de los precios de los bienes, que cayeron en marzo.

El índice de importaciones descendió por primera vez desde diciembre. Las fábricas siguieron perdiendo puestos de trabajo, aunque a un ritmo más lento. El índice de empleo en el sector manufacturero subió a 46,5 desde 44,7 en marzo.

(Reporte de Lucia Mutikani; editado en español por Manuel Farías)

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