MOSCÚ/WASHINGTON (Reuters) – La oferta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de unirse a las conversaciones de paz propuestas entre Ucrania y Rusia impulsó la diplomacia, mientras potencias desde Europa a Oriente Medio buscaban una posible salida al conflicto más mortífero en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
El presidente ruso, Vladimir Putin, propuso el domingo conversaciones directas con Ucrania y, después de que Trump dijera públicamente al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, que aceptara, Zelenski dijo que lo haría, pero que Putin debía asistir en persona.
El lunes, por sorpresa, Trump, que esta semana visitará Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos y Qatar, ofreció unirse a las conversaciones entre Ucrania y Rusia en la ciudad turca de Estambul, a caballo entre Europa y Asia.
“Tengo muchas reuniones, pero estaba pensando en volar hasta allí. Existe una posibilidad de que ocurra, supongo, si creo que las cosas pueden suceder, pero tenemos que conseguirlo”, dijo Trump antes de partir hacia su segundo viaje al extranjero desde que comenzó en enero su segundo mandato en la Casa Blanca.
“No subestimen el jueves en Turquía”, dijo Trump.
Tras la oferta de Trump, el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, habló sobre el “camino a seguir para un alto el fuego” en Ucrania con sus homólogos europeos, incluidos los ministros de Exteriores de Reino Unido y Francia, y el alto representante de la UE para la Política Exterior.
El ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Andrii Sybiha, y sus homólogos alemán y polaco también participaron en la llamada.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, habló con su homólogo turco, Hakan Fidan. El Kremlin ha agradecido repetidamente a China y a Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos y Qatar su ayuda en la mediación.
Putin envió miles de tropas a Ucrania en febrero de 2022, desatando una guerra en la que han muerto cientos de miles de soldados y que ha desencadenado el enfrentamiento más grave entre Rusia y Occidente desde la crisis de los misiles en Cuba de 1962.
Reuters informó el año pasado de que Putin estaba abierto a discutir un alto el fuego con Trump, pero que Moscú, ascendente en la guerra, descartaba hacer grandes concesiones territoriales e insiste en que Kiev abandone sus ambiciones de entrar en la OTAN.
CONVERSACIONES EN ESTAMBUL
Después de que Trump dijera a Zelenski que aceptara la oferta de conversaciones de Putin, el líder ucraniano dijo que estaría dispuesto a reunirse con Putin en persona en Estambul, aunque el Kremlin no ha hecho ningún comentario sobre si Putin viajará en persona o no.
“Estamos comprometidos con la búsqueda seria de vías para un arreglo pacífico a largo plazo”, dijo el lunes a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Antes de que los periodistas pudieran hacer más preguntas sobre las conversaciones propuestas, Peskov dijo: “Eso es todo. He dicho todo lo que podía sobre esta historia”.
Putin y el Kremlin han mencionado en repetidas ocasiones el proyecto de acuerdo de 2022 que Rusia y Ucrania negociaron poco después de que comenzara la invasión rusa.
Según ese borrador de acuerdo, del que Reuters ha revisado una copia, Ucrania debería aceptar la neutralidad permanente a cambio de garantías internacionales de seguridad por parte de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU: Reino Unido, China, Francia, Rusia y Estados Unidos.
Si Zelenski y Putin, que no ocultan su desprecio mutuo, se reunieran el jueves, sería su primer encuentro cara a cara desde diciembre de 2019.
Ucrania y sus aliados europeos dijeron a Rusia que tendría que aceptar un alto el fuego incondicional de 30 días a partir del lunes o enfrentarse a nuevas sanciones, aunque el Kremlin dijo que no se le hablaría con ultimátums.
El ejército ruso controla algo menos de una quinta parte de Ucrania, incluida toda Crimea, casi toda Luhansk y más del 70% de las regiones de Donetsk, Zaporiyia y Jersón, según estimaciones rusas. También controla un trozo de la región de Járkov.
Rusia sigue avanzando, aunque más lentamente que en 2024, y ambas partes afirman que se están produciendo combates a lo largo del frente, aunque algunos dicen que las conversaciones de Estambul ofrecen una posible oportunidad para poner fin al derramamiento de sangre.
Konstantin Kosachev, presidente del comité de asuntos internacionales del Consejo de la Federación, la cámara alta del parlamento ruso, dijo al medio de comunicación Izvestia en declaraciones publicadas el martes que las conversaciones entre Moscú y Kiev pueden avanzar más que en 2022.
“Si la delegación ucraniana se presenta a estas conversaciones con el mandato de abandonar cualquier ultimátum y buscar un terreno común, estoy seguro de que podríamos avanzar incluso más de lo que lo hicimos”, dijo Kosachev según Izvestia.
(Información de Costas Pitas, Steve Holland, las redacciones de Moscú y Kiev y Lidia Kelly en Melbourne; redacción de Costas Pitas y Lidia Kelly; edición de Guy Faulconbridge y Michael Perry; edición en español de María Bayarri Cárdenas)