Por Sybille de La Hamaide
PARÍS (Reuters) – Vacunar a los animales más ampliamente podría ayudar a detener la propagación de enfermedades mortales, proteger la salud pública y mantener la fluidez del comercio mundial, dijo el responsable de la Organización Mundial de Sanidad Animal, mientras la gripe aviar perturba las exportaciones avícolas brasileñas.
Brasil, primer exportador mundial de aves de corral, confirmó la semana pasada el primer brote de gripe aviar altamente patógena en aves domésticas, lo que llevó a varios países a prohibir el ingreso de las exportaciones brasileñas.
Mientras que la mayoría de los países recurren a políticas de sacrificio y restricciones de movimientos, la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) afirmó que la vacunación podría ayudar a reducir los brotes y, al mismo tiempo, preservar el comercio.
“La vacunación es una herramienta, es una herramienta muy buena cuando existe, pero depende de cada país, región o grupo de países identificar en qué caso será útil utilizarla o no”, dijo a Reuters la directora general, Emmanuelle Soubeyran, antes del inicio de la asamblea general de la OMSA el domingo.
Más de 633 millones de aves han muerto a causa de la gripe aviar en las dos últimas décadas, según un informe sobre el estado de la sanidad animal publicado el viernes por la OMSA, con sede en París. La enfermedad ha desencadenado sacrificios masivos, causado miles de millones en daños económicos y perturbado las cadenas de suministro de alimentos en todo el mundo.
La gripe aviar también se ha extendido a los mamíferos, incluidas las vacas lecheras en Estados Unidos, y ha infectado a cientos de personas, lo que hace temer que pueda desencadenar una nueva pandemia.
Si se aplica correctamente, la vacunación limita la propagación del virus, protege la salud animal y reduce el riesgo de infección humana. Pero es costoso desarrollar vacunas e implantarlas, y los programas de vacunación suelen conllevar restricciones comerciales por temor a que una enfermedad pueda circular inadvertidamente.
En Francia, una campaña nacional de vacunación de patos ayudó a reducir los brotes de gripe aviar de más de 300 a sólo 10 en un año. Estados Unidos y Canadá redujeron en enero su prohibición de importar aves de corral francesas, alegando su buena trazabilidad y control.
La mayoría de las campañas de vacunación contra la gripe aviar se centran en aves longevas como los patos o las reproductoras. Los pollos de engorde – pollos criados para carne – no suelen vacunarse porque no viven lo suficiente, lo que puede limitar su uso inmediato en los principales países exportadores de aves de corral.
La vacunación ha ayudado a eliminar o controlar otras enfermedades animales, como la peste bovina en 2011, la primera enfermedad animal erradicada en todo el mundo, y la segunda de cualquier tipo erradicada después de la viruela en los seres humanos, dijo OMSA en su informe.
Para hacer frente a la preocupación de que las vacunaciones puedan perturbar el comercio, la OMSA está trabajando en normas mundiales para distinguir las aves vacunadas de las infectadas, el llamado principio DIVA.
(Reporte de Sybille de La Hamaide; Editado en Español por Ricardo Figueroa)