FRÁNCFORT (Reuters) – Los consumidores de la zona euro aumentaron sus expectativas de inflación en abril, pero mantuvieron una visión estable sobre el crecimiento de los precios a más largo plazo, destacando la elevada incertidumbre en un escenario de guerra comercial mundial, según mostró el miércoles la Encuesta de Expectativas de Consumo del BCE.
Los hogares ven la inflación en el 3,1% para el próximo año, por encima del 2,9% previsto un mes antes y también muy por encima del objetivo del 2% del propio BCE.
Esta lectura, sin embargo, va en contra de las previsiones del BCE, según las cuales el crecimiento de los precios se ralentizaría debido al débil crecimiento económico, la moderación de los aumentos salariales, el descenso de los costes energéticos y la fortaleza del euro.
Esta combinación de presiones moderadas sobre los precios, junto con la incertidumbre generalizada relacionada con los aranceles estadounidenses, es la razón por la que es casi seguro que el BCE recorte los tipos de interés por octava vez en 13 meses la próxima semana.
Las expectativas de inflación a tres y cinco años vista siguieron sin cambios, según el BCE, basándose en una encuesta realizada a 19.000 adultos de 11 países de la zona euro.
Los consumidores ven un crecimiento de los precios del 2,5% en tres años y del 2,1% en cinco años.
(Información e Balazs Koranyi; edición de Bernadette Baum; editado en español por Paula Villalba)