SWEIDA, 15 jul (Reuters) -Israel llevó a cabo ataques contra las fuerzas gubernamentales sirias en el suroeste de Siria por segundo día consecutivo el martes, prometiendo mantener la zona desmilitarizada y proteger a la minoría drusa mientras continuaban los enfrentamientos mortales en la región cercana a la frontera con Israel.
Un reportero de Reuters escuchó al menos cuatro ataques mientras se oían drones sobre la ciudad de Sweida, de mayoría drusa, y vio cómo remolcaban un tanque dañado. Se oyeron ráfagas de disparos y se vieron tres cadáveres en el suelo. Decenas de personas han muerto en combates en la región desde el domingo.
El recrudecimiento de la violencia subraya los retos a los que se enfrenta el presidente interino, Ahmed al-Sharaa, que ha luchado por imponer su control sobre la zona próxima a la frontera israelí desde que derrocó a Bashar al-Asad en diciembre.
Aunque Sharaa se ha visto favorecido por la rápida mejora de los lazos con la administración del presidente estadounidense, Donald Trump, la violencia ha puesto de relieve las persistentes tensiones sectarias y la desconfianza entre los grupos minoritarios hacia su Gobierno, liderado por islamistas, desconfianza que se vio agravada por los asesinatos masivos de alauíes en marzo.
Israel, que ha atacado Siria en varias ocasiones en nombre de la protección de los drusos, llevó a cabo sus últimos ataques después de que el influyente jeque druso Hikmat al-Hajri emitiera un comunicado en el que acusaba a las tropas gubernamentales de incumplir el alto el fuego e instaba a los combatientes a hacer frente a lo que calificaba de bárbaro ataque.
Tras la comparecencia de Al-Hajiri en una declaración grabada, el ministro de Defensa sirio, Murhaf Abu Qasra, emitió un comunicado en el que decía que se había instaurado un alto el fuego total y afirmaba que las fuerzas gubernamentales solo abrirían fuego si se les disparaba.
Abu Qasra dijo también que se había ordenado a la policía militar que se desplegara en Sweida para “controlar el comportamiento de los militares y exigir responsabilidades a los infractores”, informó la agencia estatal de noticias SANA.
El reportero de Reuters vio a hombres en uniforme de faena quemando y saqueando casas y tiendas y prendiendo fuego a una tienda que vendía alcohol.
Los drusos son un grupo minoritario cuya fe es una rama del islam y tiene seguidores en Israel, Siria y Líbano.
“PROFUNDA ALIANZA DE HERMANDAD”
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el ministro de Defensa, Israel Katz, dijeron que habían ordenado a los militares israelíes que atacaran a las “fuerzas del régimen” y el armamento llevado a Sweida para ser utilizado contra los drusos.
En un comunicado, afirmaron que el despliegue de fuerzas gubernamentales violaba una medida de desmilitarización que había pedido a Damasco para que se abstuviera de introducir en el sur de Siria fuerzas y armas que supusieran una amenaza para Israel.
“Israel se compromete a impedir que se cause daño a los drusos en Siria debido a la profunda alianza de hermandad con nuestros ciudadanos drusos de Israel”, afirmaron. “Estamos actuando para impedir que el régimen sirio los perjudique y para garantizar la desmilitarización de la zona adyacente a nuestra frontera con Siria.”
Reuters informó en mayo de que Israel y las autoridades sirias habían mantenido conversaciones directas centradas en la seguridad.
Los últimos actos de violencia comenzaron el domingo con enfrentamientos entre grupos armados drusos y combatientes beduinos en la provincia de Sweida, que desplazaron a miles de personas.
(Información de Karam Masri en Sweida, Khalil Ashawi en Damasco, Maya Gebeily en Beirut y Steven Scheer en Jerusalén; redacción de Maya Gebeily y Tom Perry; edición de Gareth Jones; edición en español de María Bayarri Cárdenas y Jorge Ollero Castela)