GAZA, 19 jul (Reuters) -Al menos 36 personas murieron por fuego israelí cuando se dirigían a un lugar de distribución de ayuda en Gaza en la madrugada del sábado, según el Ministerio de Salud de Gaza y el hospital Nasser de Jan Yunis.
El ejército israelí dijo haber efectuado disparos de advertencia contra los sospechosos que se acercaron a sus tropas después de que no hicieran caso a las llamadas para que se detuvieran, a un kilómetro aproximadamente de un lugar de distribución de ayuda que no estaba activo en ese momento.
Mohammed al-Jalidi, residente en Gaza, dijo que formaba parte del grupo que se acercaba al lugar y que no oyó ninguna advertencia antes de que comenzaran los disparos. “Pensábamos que venían a organizarnos para que pudiéramos recibir ayuda, pero de repente vi los jeeps que venían de un lado y los tanques del otro y empezaron a dispararnos”, aseguró.
El Fondo Humanitario de Gaza (GHF por su sigla en inglés), grupo respaldado por Estados Unidos que gestiona el centro de ayuda, dijo que el sábado no se produjeron incidentes ni víctimas mortales y que ha advertido en repetidas ocasiones a la población de que no se desplace a sus puntos de distribución por la noche.
“La actividad de las FDI (Fuerzas de Defensa de Israel) que causó víctimas mortales se produjo horas antes de que abrieran nuestros centros y, según tenemos entendido, la mayoría de las víctimas se produjeron a varios kilómetros del centro más cercano del GHF”, declaró.
El ejército israelí afirmó que estaba estudiando el incidente.
NO HAY MÁS TIEMPO
El GHF utiliza empresas privadas de seguridad y logística estadounidenses para hacer llegar los suministros a Gaza, eludiendo en gran medida un sistema dirigido por la ONU que, según Israel, ha permitido a los militantes dirigidos por Hamás saquear los envíos de ayuda destinados a la población civil. Hamás niega la acusación.
La ONU ha calificado el modelo del GHF de inseguro y de violación de las normas de imparcialidad humanitaria, lo que la entidad niega.
El martes, la oficina de derechos humanos de la ONU en Ginebra declaró que había registrado al menos 875 muertes en las últimas seis semanas en las inmediaciones de centros de ayuda y convoyes de alimentos en Gaza, la mayoría de ellos cerca de los puntos de distribución de la GHF.
La mayor parte de esas muertes fueron causadas por disparos que la población local ha atribuido al ejército israelí. El ejército ha reconocido que hubo civiles heridos, afirmando que las fuerzas israelíes habían recibido nuevas instrucciones con “lecciones aprendidas”.
Al menos 50 personas más murieron el sábado en otros ataques israelíes en Gaza, según informaron las autoridades sanitarias, incluyendo un ataque que cobró la vida del jefe de la fuerza policial dirigida por Hamás en Nuseirat, en el centro de Gaza, y de 11 familiares.
El ejército israelí declaró que había atacado depósitos de armas y puestos de francotiradores de los militantes en algunos lugares del enclave.
La guerra comenzó cuando militantes dirigidos por Hamás irrumpieron en Israel el 7 de octubre de 2023, matando a 1.200 personas, en su mayoría civiles, y llevándose a 251 rehenes a Gaza, según recuentos israelíes.
Desde entonces, la campaña militar israelí contra Hamás en Gaza ha matado a unos 58.000 palestinos, la mayoría civiles según las autoridades sanitarias, ha desplazado a casi toda la población y ha sumido al enclave en una crisis humanitaria, dejando gran parte del territorio en ruinas.
Israel y Hamás mantienen conversaciones indirectas en Qatar para alcanzar un alto el fuego de 60 días propuesto por Estados Unidos y un acuerdo sobre los rehenes, con la mediación de Egipto y Qatar, aunque no hay señales de ningún avance inminente.
Se estima que al menos 20 de los 50 rehenes restantes en Gaza siguen con vida. Einav Zangauker, cuyo hijo Matan fue secuestrado de su kibutz y se encuentra retenido por Hamás, instó a los líderes israelíes a llegar a un acuerdo con el grupo militante.
“Todo un pueblo quiere traer a casa a los 50 rehenes y poner fin a la guerra”, dijo Zangauker frente a la sede de defensa de Israel en Tel Aviv. “Mi Matan está solo en los túneles”, dijo. “No tiene más tiempo”.
(Reporte de Hussam al-Masri en Gaza, Nidal al-Mughrabi en El Cairo, Maayan Lubell en Jerusalén y Rami Amichay en Tel Aviv; Escrito por Maayan Lubell; Editado en Español por Manuel Farías)