Por Stephanie van den Berg y Alison Withers
LA HAYA, Países Bajos, 23 jul (Reuters) -El máximo tribunal de Naciones Unidas dijo el miércoles a los países ricos que deben cumplir sus compromisos internacionales para frenar la contaminación si no quieren arriesgarse a tener que pagar indemnizaciones a las naciones más afectadas por el cambio climático.
En un dictamen aplaudido por los pequeños estados insulares y los grupos ecologistas como un paso legal para responsabilizar a los grandes contaminadores, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) afirmó que los países deben hacer frente a la “amenaza urgente y existencial” del cambio climático.
“Los estados deben cooperar para alcanzar objetivos concretos de reducción de emisiones”, dijo el juez Yuji Iwasawa, quien añadió que el incumplimiento e las “estrictas obligaciones” impuestas en los tratados sobre el clima constituye una violación del derecho internacional.
El tribunal sostuvo que los países también son responsables de las acciones de las empresas bajo su jurisdicción o control.
No frenar la producción de combustibles fósiles y las subvenciones podría dar lugar a “reparaciones plenas a los estados perjudicados en forma de restitución, indemnización y satisfacción, siempre que se cumplan las condiciones generales del derecho de la responsabilidad del Estado”.
“No esperaba que fuera tan bueno”, dijo a la prensa el ministro del Clima de Vanuatu, Ralph Regenvanu, tras la lectura del dictamen unánime de la CIJ.
Vishal Prasad, uno de los estudiantes de Derecho que presionó al Gobierno de Vanuatu, en el Pacífico Sur, para que llevara el caso ante la CIJ, afirmó que “esta opinión consultiva es una herramienta para la justicia climática. Y vaya si la CIJ nos ha dado una herramienta fuerte para seguir luchando por la justicia climática”.
El juez Iwasawa, que presidió el panel de 15 jueces, dijo que los planes climáticos nacionales deben tener la mayor ambición y mantener de forma colectiva los estándares para cumplir los objetivos del Acuerdo de París de 2015, que incluyen intentar mantener el calentamiento global por debajo de 1,5 grados centígrados.
Si bien la decisión fue más fuerte de lo que la mayoría esperaba, su impacto puede verse limitado por el hecho de que Estados Unidos, el mayor emisor histórico de gases de efecto invernadero del mundo, y el segundo en la actualidad detrás de China, se ha movido bajo la presidencia de Donald Trump para deshacer todas las regulaciones climáticas.
Con el escepticismo sobre el cambio climático extendiéndose en Estados Unidos y en otros lugares, el juez Iwasawa expuso la causa del problema y la necesidad de una respuesta colectiva en su lectura de dos horas de la opinión del tribunal.
“Las emisiones de gases de efecto invernadero están inequívocamente causadas por actividades humanas que no están limitadas territorialmente”, señaló.
Históricamente, los países industrializados ricos han sido los responsables de la mayor parte de las emisiones. Iwasawa afirmó que estas naciones deben tomar la iniciativa a la hora de abordar el problema.
El dictamen no es vinculante, pero tiene peso jurídico y político y los futuros casos climáticos no podrán ignorarlo, según los expertos jurídicos.
“Este es el comienzo de una nueva era de responsabilidad climática a nivel mundial”, dijo Danilo Garrido, asesor jurídico de Greenpeace.
Harj Narulla, abogado especializado en litigios climáticos y abogado de las Islas Salomón en el caso, dijo que la CIJ estableció la posibilidad de que los grandes emisores sean demandados con éxito.
“Estas reparaciones implican la restitución -como la reconstrucción de las infraestructuras destruidas y la restauración de los ecosistemas- y también una compensación monetaria”, indicó.
(Reporte adicional de Bart Meijer, Valerie Volcovici y Zoran Mikletic; escrito por Ingrid Melander y Stephanie van den Berg; editado en español por Carlos Serrano)