Por Dan Burns
5 ago (Reuters) – La actividad del sector servicios en Estados Unidos se estancó de forma inesperada en julio, con pocos cambios en los pedidos y un mayor debilitamiento del empleo, pese a que los costos de los insumos aumentaron a un máximo en casi tres años, lo que subraya la continua incertidumbre sobre la política arancelaria de la administración Trump en las empresas.
El Instituto de Gerencia y Abastecimiento (ISM) dijo el martes que su índice de gerentes de compras (PMI) no manufacturero cayó al 50,1 el mes pasado desde el 50,8 de junio. Los economistas sondeados por Reuters esperaban un alza al 51,5. Una lectura del PMI por encima de 50 indica crecimiento en el sector servicios, que representa más de dos tercios de la economía.
Los economistas afirman que las empresas siguen teniendo dificultades para digerir los agresivos aranceles impuestos por el presidente Donald Trump a los bienes importados del extranjero.
Con tasas arancelarias que oscilan entre el 10% y el 41% y entrarán en vigor el 7 de agosto, el Laboratorio de Presupuestos de Yale estima ahora que el gravamen medio global de Estados Unidos se ha disparado al 18,3%, el más alto desde 1934, desde entre el 2% y el 3% antes de que Trump regresara a la Casa Blanca en enero.
La medida de nuevos pedidos de la encuesta ISM disminuyó al 50,3 el mes pasado desde el 51,3 de junio, con los pedidos de exportación cayendo de nuevo en contracción por cuarta vez en cinco meses.
El índice de empleo en el sector servicios cayó al 46,4, su nivel más bajo desde marzo, desde el 47,2 de junio. Se ha contraído en cuatro de los últimos cinco meses, y la lectura se produjo después de que el Departamento de Trabajo publicó la semana pasada un informe inesperadamente flojo sobre el empleo en Estados Unidos.
No sólo la creación de empleo fue menor de lo esperado en julio, sino que los datos comunicados antes para mayo y junio fueron revisados a la baja en 258.000 puestos, la mayor revisión neta a la baja registrada fuera de la pandemia del COVID-19. La enorme revisión llevó a Trump a despedir el viernes a la jefa de la Oficina de Estadísticas Laborales.
Las presiones sobre los precios, mientras tanto, siguen aumentando. El índice de precios pagados de la encuesta subió al 69,9, el nivel más alto desde octubre de 2022, desde el 67,5 en junio.
(Editado en español por Carlos Serrano)