BOGOTÁ, 26 ago (Reuters) – Al menos 34 militares fueron secuestrados por civiles armados en una zona selvática del sureste de Colombia después de combates en los que murieron 11 guerrilleros, incluido un comandante de una facción disidente de la antigua guerrilla de las FARC, informó el martes el ministro de Defensa, Pedro Sánchez.
Los enfrentamientos en los que murió el líder del Estado Mayor Central (EMC), una facción de las izquierdistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que rechazó un acuerdo de paz del 2016, se produjeron en zona rural del municipio de El Retorno, en el departamento del Guaviare.
En la misma región selvática, considerada estratégica para el narcotráfico y con extensos cultivos de hoja de coca, la materia prima de la cocaína, se registraron posteriormente combates en los que murieron otros 10 rebeldes. Los militares fueron secuestrados en momentos en que iban a ser evacuados, precisó Sánchez.
“El secuestro de 34 militares obedece a la acción ilegal, delictiva de personas vestidas de civil que dicen retener a unos militares”, dijo el ministro de Defensa en declaraciones a periodistas. “No, no los están reteniendo, eso va contra la libertad de ellos, eso es un secuestro, están interrumpiendo una operación militar”.
Los combates y las retenciones de efectivos de las Fuerzas Armadas son frecuentes en Colombia como parte de un conflicto interno armado de seis décadas que ha dejado más de 450.000 muertos y en el que además de guerrillas izquierdistas intervienen otros grupos armados ilegales conformados por antiguos paramilitares de derecha.
Todos los grupos armados ilegales que se enfrentan entre sí y con las Fuerzas Armadas por el control territorial de zonas selváticas y montañosas se financian del narcotráfico y de la extracción ilícita de oro, según fuentes de seguridad.
El presidente izquierdista Gustavo Petro lanzó en el 2022 una política de paz total para tratar de poner fin a la confrontación a través de negociaciones, pero a menos de un año de terminar su Gobierno no hay ningún resultado concreto mientras que el conflicto y la violencia aumentan en el país de 50 millones de habitantes, de acuerdo con grupos de derechos humanos.
(Reporte de Luis Jaime Acosta)