Por Anne Kauranen
HELSINKI, 28 ago (Reuters) -La escalada de ataques del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, contra la Reserva Federal podría tener efectos en cadena sustanciales y globales en los mercados financieros y la economía real, incluido un aumento de la inflación, dijo el responsable de política monetaria del BCE Olli Rehn.
La incertidumbre sobre la independencia de la autoridad monetaria más importante del mundo, la Fed, ha aumentado este año, ya que Trump ha criticado repetidamente a su presidente, Jerome Powell, y el lunes anunció que despedía a una de sus gobernadoras, Lisa Cook.
“Si la independencia del banco central se desmoronara de verdad y la Reserva Federal de Estados Unidos empezara a tomar decisiones por motivos distintos a los principios de una política monetaria sólida, por ejemplo, porque el presidente exige tipos de interés más bajos, la consecuencia inevitable sería el repunte de la inflación”, dijo Rehn en una mesa redonda sobre democracia celebrada en Turku, Finlandia.
El gobernador del Banco de Finlandia dijo que Trump ha ejercido una fuerte presión sobre la Fed para que recorte los tipos de interés durante bastante tiempo, a pesar de que su independencia ha sido un principio inviolable desde principios de la década de 1980.
“Ahora, sin embargo, este principio se tambalea gravemente. Esto podría tener importantes repercusiones globales tanto en los mercados financieros como en la economía real”, afirmó Rehn.
Consideró improbable una evolución similar en Europa gracias a la solidez de las instituciones, aunque dijo que la presión podría “desbordarse” al otro lado del Atlántico a través de algunos países y de los mercados financieros.
Dijo que los europeos deberían tomar medidas para reforzar la confianza mundial en el euro como moneda segura, a fin de evitar un deterioro similar de la autonomía de los bancos centrales en Europa.
“No es una mera coincidencia que la inflación de la zona euro se sitúe ahora en el objetivo del 2%. De hecho, está relacionado con la toma de decisiones independiente del banco central”, afirmó.
La hegemonía mundial del dólar como moneda de reserva ha demostrado su resistencia, por lo que Rehn consideró improbable su rápido debilitamiento.
“Digo esto, sin embargo, con una advertencia importante: si los cimientos institucionales del dólar se desmoronaran, me refiero a los principios del Estado de derecho y la democracia, así como a las libertades civiles, podríamos encontrarnos en una situación diferente”.
Aunque el crecimiento de la zona del euro ha demostrado ser más resistente de lo esperado, Rehn afirmó que la inflación se ralentizará por debajo del objetivo del 2% a corto plazo, debido al abaratamiento de la energía, la fortaleza del euro y la ralentización de la inflación de los servicios.
“En el Consejo de Gobierno del BCE seguimos de cerca la situación económica y estamos preparados para actuar en caso necesario”, dijo Rehn.
(Información de Anne Kauranen en Helsinki; edición de Terje Solsvik, Sharon Singleton y Hugh Lawson; edición en español de María Bayarri Cárdenas)