Por Elvira Pollina
MILÁN, 30 sep (Reuters) -El ayuntamiento de Milán aprobó el martes la venta del Estadio San Siro y los terrenos circundantes a los clubes de fútbol locales Inter y AC Milan por 197 millones de euros (230 millones de dólares), lo que allana el camino para su demolición y la construcción de un nuevo recinto.
Construido originalmente en 1926, San Siro, con sus llamativas escaleras de caracol que rodean el exterior del estadio, fue renovado para la Copa Mundial de 1990, pero carece de las instalaciones que ofrecen otros grandes estadios de fútbol europeos.
El AC Milan y el Inter de Milán, que comparten desde hace tiempo el uso del histórico recinto, consideran vital la construcción conjunta de un estadio moderno para aumentar sus ingresos por partidos, que son inferiores a los de sus rivales europeos.
Los dos clubes contrataron la semana pasada a los estudios de arquitectura Foster + Partners y Manica para trabajar en un nuevo estadio con capacidad para 71.500 espectadores, parte de una remodelación más amplia de la zona con edificios comerciales y residenciales.
Debatido por primera vez en 2019, el plan para demoler San Siro y reemplazarlo por una instalación moderna se enfrentó a la oposición de políticos y comités ciudadanos locales y otros que querrían preservar uno de los templos del fútbol italiano.
“Hemos intentado pasar página y sólo estamos al principio”, dijo la vicealcaldesa de Milán, Anna Scavuzzo, tras las casi 12 horas de sesión del consejo municipal, que concluyó en la madrugada del martes.
Según los proyectos de los clubes, San Siro, que acogerá la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno en febrero, seguirá albergando sus partidos hasta que el nuevo estadio esté listo en las inmediaciones del solar.
El antiguo estadio será demolido, a excepción de una sección patrimonial que comprende parte de su segunda grada.
Italia está sometida a una creciente presión para que mejore la calidad de sus estadios, impulsada por los inversores extranjeros que apuestan por los clubes de la Serie A y por la necesidad de contar con recintos más funcionales para la Eurocopa de 2032, que organizará junto con Turquía.
Conocido oficialmente como Giuseppe Meazza, en honor a un delantero que jugó en el AC Milan y el Inter entre los años 1920 y 1940, San Siro es el estadio más grande de Italia, con capacidad para casi 76.000 espectadores, y también acoge conciertos.
El alcalde, Giuseppe Sala, respaldado por una coalición de centro-izquierda, también intentó promover su renovación total, pero tanto el Milan como el Inter, propiedad de los fondos de inversión estadounidenses RedBird y Oaktree respectivamente, consideraron inviable la idea.
Sala aceptó finalmente seguir adelante con la propuesta de los clubes después de que estos empezaran a estudiar planes para construir dos estadios separados en las afueras de Milán, lo que podría dejar a la ciudad con la carga de un estadio abandonado.
(1 dólar = 0,8562 euros)
(Información de Elvira Pollina; edición de Keith Weir; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)