Suizos y españoles de la flotilla a Gaza denuncian “condiciones de detención inhumanas”

Por Olivia Le Poidevin y David Latona

GINEBRA, 6 oct (Reuters) -Activistas suizos y españoles de una flotilla internacional que intentó entregar ayuda a Gaza la semana pasada afirmaron haber sido sometidos a condiciones inhumanas durante su detención por el ejército israelí.

Entre los nueve miembros de la flotilla que llegaron a Suiza, algunos alegaron privación de sueño, falta de agua y comida, así como golpes, patadas y haber sido encerrados en una jaula, dijo en un comunicado el grupo que los representaba.

Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores israelí rechazó las acusaciones.

Los activistas españoles también denunciaron malos tratos a su llegada a España a última hora del domingo tras ser deportados.

“Nos han golpeado, nos han arrastrado por los suelos, nos han vendado los ojos, nos han atado de pies y manos, nos han metido en jaulas, nos han insultado…”, dijo el abogado Rafael Borrego a la prensa en el aeropuerto de Madrid.

El ministro de Justicia israelí, Yariv Levin, dijo el lunes que 170 activistas de la flotilla habían sido deportados, y que de los 309 que seguían detenidos en Israel se esperaba que 200 fueran expulsados en las próximas 24 horas.

Activistas suecos denunciaron el sábado que a la activista climática Greta Thunberg la empujaron y la obligaron a llevar una bandera israelí durante su detención, mientras que otros dijeron que les habían retenido agua y alimentos limpios y les habían confiscado medicamentos y pertenencias.

ISRAEL DICE QUE LAS AFIRMACIONES SON MENTIRAS

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel ha calificado de “absolutas mentiras” las denuncias generalizadas de malos tratos a los detenidos tras la interceptación de la flotilla.

Un portavoz dijo a Reuters el fin de semana que todos los detenidos tuvieron acceso a agua, comida y aseos y añadió: “No se les negó el acceso a un abogado y se respetaron plenamente todos sus derechos legales”.

Una detenida española mordió a una trabajadora sanitaria en la prisión de Ktzi’ot​ tras un examen rutinario antes de su deportación, causándole heridas leves tratadas “in situ”, según informó el ministerio.

El domingo, la embajada suiza en Tel Aviv visitó a los diez ciudadanos suizos que aún permanecían en prisión y afirmó que todos se encontraban “relativamente bien de salud, dadas las circunstancias”. Añadió que está haciendo todo lo posible para garantizar su pronto regreso.

La exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que también viajaba en la flotilla, dijo que “(ha habido) maltrato, pero no es nada comparado con lo que sufre cada día el pueblo palestino”.

Los periodistas españoles Carlos de Barrón y Néstor Prieto afirmaron que las autoridades israelíes firmaron un comunicado en nombre de los activistas deportados en la que afirmaban que habían entrado ilegalmente en Israel.

“Han plantado documentación en hebreo delante de nosotros, negándonos derecho a traductor, y no hemos tenido asistencia consular porque no permitieron acceder al cónsul (español) al puerto de Ashdod”, dijo Prieto.

El personal consular ha visitado a los activistas en la prisión, según declaraciones de varios países cuyos ciudadanos fueron detenidos.

Se esperaba que más activistas fueran liberados el lunes y enviados a Atenas.

(Información de Olivia Le Poidevin; David Latona y Alexander Cornwell; redacción de Charlie Devereux; edición de Alexandra Hudson; edición en español de Patrycja Dobrowolska y Paula Villalba)

tagreuters.com2025binary_LYNXNPEL9509W-VIEWIMAGE