Por Nidal al-Mughrabi
EL CAIRO, 8 oct (Reuters) -Las conversaciones para poner fin a la guerra en Gaza se vieron reforzadas por la llegada de altos cargos de Israel y Estados Unidos el miércoles, después de que Hamás entregó sus listas de rehenes y presos palestinos que serían liberados en un canje.
El plan de 20 puntos del presidente Donald Trump parecía estar más cerca que cualquier otro esfuerzo anterior para detener la guerra, por lo que las delegaciones estaban reforzando su presencia en las conversaciones, que comenzaron el lunes en la ciudad turística egipcia de Sharm el Sheij.
El yerno de Trump, Jared Kushner, y el enviado especial Steve Witkoff llegaron a Sharm el Sheij, dijeron fuentes familiarizadas con las conversaciones, y un funcionario israelí dijo que el ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, un confidente cercano del primer ministro Benjamin Netanyahu, también se encuentra allí.
Se esperaba que ambos enviados estadounidenses se unan a las conversaciones, junto con el primer ministro de Qatar, el jeque Mohammed bin Abdulrahman al-Thani.
El ministro turco de Asuntos Exteriores, Hakan Fidan, dijo que las negociaciones indirectas entre Israel y el grupo militante palestino Hamás habían avanzado “mucho” y que se declararía un alto el fuego si llegaban a un resultado positivo.
Trump también se mostró optimista sobre los avances hacia un acuerdo el martes, y los Estados europeos, árabes y otros se reunirán en París el jueves para debatir la transición de Gaza tras la guerra, en la que es probable que Washington esté representado, según fuentes diplomáticas.
Sin embargo, aún no se han concretado detalles importantes, como el calendario, la administración de la Franja de Gaza tras la guerra y el destino de Hamás.
Las autoridades de Gaza afirman que más de 67.000 personas han muerto y gran parte del enclave ha quedado arrasado desde que Israel inició su respuesta militar al ataque de Hamás hace dos años. Alrededor de 1.200 personas murieron y 251 fueron tomadas como rehenes en Gaza, según las autoridades israelíes, y se cree que 20 de los 48 rehenes aún retenidos están vivos.
Hamás dijo que había entregado sus listas de rehenes y prisioneros palestinos para ser intercambiados en un canje, y se mostró optimista sobre las conversaciones hasta el momento.
Se espera que la lista de palestinos que Hamás quiere liberar incluya a algunos de los presos más destacados jamás encarcelados por Israel, cuya liberación había estado vedada en anteriores treguas.
Según una fuente palestina cercana a las conversaciones, la lista incluye a Marwan al-Barghouti, dirigente del movimiento Fatah, y a Ahmed Saadat, jefe del Frente Popular para la Liberación de Palestina. Ambos cumplen múltiples cadenas perpetuas por su participación en atentados en los que murieron israelíes.
Hamás dice que las negociaciones indirectas se han centrado hasta ahora en tres cuestiones: la detención del conflicto, la retirada de las fuerzas israelíes de Gaza y el acuerdo de canje.
El grupo se ha negado hasta ahora a discutir la exigencia de Israel de que Hamás entregue las armas que, según la fuente palestina, Hamás rechazaría mientras las tropas israelíes ocupen territorio palestino.
Dos fuentes familiarizadas con las conversaciones confirmaron que entre los puntos conflictivos figuraba el mecanismo de retirada israelí, para el que Hamás exige un calendario claro vinculado a la liberación de los rehenes y garantías de una retirada completa de las fuerzas israelíes.
ISRAEL REDUCE SU OFENSIVA
Dentro de Gaza, Israel ha reducido su campaña militar a instancias de Trump, pero no ha detenido del todo sus ataques.
El ejército israelí dijo que sus fuerzas habían matado a varios militantes en la ciudad de Gaza, el principal centro urbano de Gaza, que, según dijo, se dirigían a atacar a soldados israelíes.
Las autoridades médicas de Gaza informaron de la muerte de ocho personas en ataques israelíes en las últimas 24 horas, la cifra más baja en semanas. El número de víctimas mortales diarias había sido unas 10 veces superior durante el último mes, a medida que las fuerzas israelíes avanzaban sobre la ciudad de Gaza.
“Esperamos de Dios que haya un alto el fuego lo antes posible, porque la gente no puede soportar más el sufrimiento”, dijo Jehad al-Shagnobi, cuya casa quedó destruida en el distrito de Sabra de la ciudad de Gaza.
Otro participante en las conversaciones será el jefe de espionaje turco Ibrahim Kalin, lo que apunta a un papel cada vez más importante de Turquía, miembro de la OTAN con estrechos contactos con Hamás.
El presidente Tayyip Erdogan dijo que Trump había pedido a Turquía que ayudara a persuadir a Hamás para que acepte el acuerdo.
(Información de Tuvan Gumrukcu y Daren Butler en Ankara, Jana Choukeir y Tala Ramadan en Dubái y Maayan Lubell en Jerusalén; redacción de Michael Georgy; edición de Peter Graff; edición en español de María Bayarri Cárdenas, Patrycja Dobrowolska y Javier López de Lérida)