Por Joshua McElwee
CIUDAD DEL VATICANO, 16 oct (Reuters) -La comisión de protección de menores del Vaticano criticó el jueves en un informe anual a altos dirigentes católicos por no actuar con suficiente rapidez para ayudar a las víctimas de abusos sexuales por parte de miembros del clero y aplicar nuevas medidas de protección en todo el mundo.
Durante décadas, la Iglesia, que cuenta con 1.400 millones de miembros, se ha visto sacudida por escándalos de abusos y encubrimiento en todo el mundo, que han dañado su credibilidad y le han costado cientos de millones de dólares en indemnizaciones.
El nuevo informe culpaba a los dirigentes de la Iglesia no haber facilitado información a las víctimas sobre cómo se habían tramitado sus denuncias de abusos, o si se había sancionado a los obispos negligentes.
También se afirmaba que no siempre se había respondido a las peticiones de información de la propia comisión sobre los protocolos de salvaguarda y que la Iglesia italiana no había facilitado todos los detalles.
“En muchos casos (…) las víctimas o supervivientes informan de que la Iglesia ha respondido con acuerdos vacíos, gestos performativos y una persistente negativa a comprometerse de buena fe con las víctimas supervivientes”, decía el informe.
COMISIÓN CRÍTICA CON LOS DIRIGENTES DE LA IGLESIA
La comisión vaticana, creada por el difunto papa Francisco en 2014, se había visto sacudida por las dimisiones de varios de sus miembros a lo largo de los años y no publicó su primer informe anual hasta el año pasado.
El nuevo informe, de 103 páginas, es el texto más sustancial de la comisión hasta ahora y es frecuentemente crítico con el liderazgo de la Iglesia, sin nombrar a individuos.
Su tema principal es el asunto de las reparaciones para las víctimas de abusos, pero también evalúa los esfuerzos de salvaguarda de la Iglesia en 22 países y en un departamento de alto rango del Vaticano.
El departamento analizado es el Dicasterio para la Evangelización, un amplio organismo responsable de supervisar las actividades de la Iglesia en la mayoría de los países en desarrollo.
Según el informe, el dicasterio solo cuenta con un responsable encargado de las cuestiones de salvaguarda. También decía que la falta de claridad en la distribución del trabajo sobre los casos de abusos con otros departamentos del Vaticano “puede crear confusión y retrasos en el inicio de las investigaciones y la tramitación de las denuncias”.
LOS OBISPOS ITALIANOS NO COOPERARON PLENAMENTE CON EL PANEL
Entre los países evaluados por el nuevo informe se encuentra Italia, durante mucho tiempo bastión católico que ha tardado en abordar los abusos por parte del clero.
El informe critica a los obispos del país por no colaborar estrechamente con la comisión vaticana y afirma que solo 81 de las 226 diócesis católicas italianas respondieron a un cuestionario sobre prácticas de protección enviado por el grupo.
Corea del Sur, otro país evaluado, tuvo una participación del 100%.
FALTA DE TRANSPARENCIA EN LA DESTITUCIÓN DE OBISPOS
La comisión antiabusos es la primera de este tipo en la Iglesia católica. Francisco, fallecido en abril, hizo de los abusos por parte del clero una prioridad de sus 12 años de papado, pero obtuvo resultados dispares.
El papa León XIV, elegido en mayo para sustituir a Francisco, se ha reunido varias veces con los miembros de la comisión y en julio nombró a un nuevo presidente para el grupo, un arzobispo francés.
Una de las principales reformas de Francisco fue la creación de un sistema global para que los católicos denunciaran sospechas de abusos o encubrimientos por parte de los obispos. Los supervivientes de abusos y sus defensores han pedido más medidas, incluida una política global de tolerancia cero para los sacerdotes acusados de abusos.
El informe del jueves criticaba al Vaticano por su falta de transparencia a la hora de destituir a obispos por asuntos relacionados con abusos o encubrimiento.
El Vaticano rara vez da las razones de la destitución de un obispo, incluso en casos relacionados con abusos, prefiriendo decir simplemente que el papa aceptó la renuncia del obispo.
“La falta de rendición de cuentas por parte de los dirigentes de la Iglesia fue una cuestión planteada con frecuencia por las víctimas y supervivientes”, dice el informe.
“La Comisión subraya la importancia de comunicar públicamente las razones de la dimisión y/o destitución cuando la decisión está relacionada con casos de abusos o negligencia.”
(Información de Joshua McElwee; edición de Alexandra Hudson; editado en español por Patrycja Dobrowolska)