Por Sharon Kimathi
LONDRES, 28 oct (Reuters) -El multimillonario inversor y filántropo Bill Gates pidió el martes a los líderes mundiales que se adapten a los fenómenos meteorológicos extremos y se centren en mejorar los resultados sanitarios en lugar de en los objetivos de reducción de la temperatura, antes de las conversaciones sobre el clima de la COP30 en Brasil.
La COP30 se celebrará del 10 al 21 de noviembre en la ciudad portuaria de Belém, en la baja Amazonia brasileña. Los países deben presentar compromisos climáticos nacionales actualizados y evaluar los avances en los objetivos de energías renovables acordados en cumbres anteriores.
El mundo ha pasado la última década trabajando para alcanzar los objetivos del Acuerdo de París, que pretendía limitar el calentamiento global a menos de 2 grados centígrados por encima de la media preindustrial para mediados de siglo, algo que sigue muy lejos de cumplirse.
Aunque el cambio climático es grave, “no acaba con la civilización”, publicó Gates en su blog personal. Escribió que, en lugar de centrarse en la temperatura como la mejor medida del progreso, la resiliencia climática se construiría mejor reforzando la salud y la prosperidad.
Pidió un cambio de enfoque para mejorar el bienestar humano, especialmente en las regiones vulnerables, mediante inversiones en el acceso a la energía, la atención sanitaria y la resiliencia agrícola.
Estas áreas, argumentó, ofrecen beneficios más equitativos que los objetivos de temperatura y deberían ser centrales en las estrategias climáticas debatidas en la COP30.
Gates, que ha invertido miles de millones para acelerar la innovación en tecnologías limpias a través de su red de empresas Breakthrough Energy, centrada en el clima, también desafió a los dirigentes y a los donantes a analizar si la ayuda al clima se gasta de forma eficaz.
Les instó a utilizar los datos para maximizar el impacto y pidió a los inversores que respalden a las empresas que desarrollan tecnologías limpias de alto impacto para que puedan reducir más rápidamente los costes.
Dijo que las muertes directas por catástrofes naturales se han reducido un 90% en el último siglo, hasta situarse entre 40.000 y 50.000 al año, en gran parte gracias a la mejora de los sistemas de alerta y a unas infraestructuras más resistentes.
El secretario general de la ONU, António Guterres, y la Organización Meteorológica Mundial instaron la semana pasada a los países a poner en marcha sistemas de alerta de catástrofes para proteger a la población contra los fenómenos meteorológicos extremos.
La OMM señaló que, en las últimas cinco décadas, los peligros relacionados con el tiempo, el agua y el clima han causado la muerte de más de 2 millones de personas, y que el 90% de esas muertes se produjeron en países en desarrollo.
(Información de Sharon Kimathi; edición de Simon Jessop y Nia Williams; edición en español de María Bayarri Cárdenas)











