29 oct (Reuters) -El IBEX 35 inició la sesión del miércoles con un ligero retroceso, en una jornada marcada por la cautela y una previsible recogida de beneficios tras conquistar en la víspera su segundo cierre histórico por encima de los 16.000 puntos.
Los inversores se mantenían a la expectativa del desenlace de la reunión de la Reserva Federal (Fed) y de la nueva oleada de resultados de los gigantes tecnológicos de Wall Street, mientras el optimismo por un posible acuerdo comercial entre EEUU y China servía de contrapeso.
El foco principal del día se centra en el comunicado de la Reserva Federal. El mercado da por descontada una bajada de tipos de 25 puntos básicos, por lo que la atención se dirigirá a las pistas que el banco central y su presidente, Jerome Powell, puedan ofrecer sobre futuros recortes.
La tarea se complica por el cierre de la Administración en Estados Unidos, que ha dejado a los responsables monetarios sin los datos económicos de referencia. Aun así, los operadores ya anticipan otro posible recorte en la reunión de diciembre.
En el plano geopolítico, los mercados acogían con optimismo las expectativas de un nuevo deshielo en las relaciones comerciales entre EEUU y China. El presidente estadounidense, Donald Trump, se ha mostrado optimista sobre la posibilidad de lograr una tregua en la guerra comercial con su homólogo chino, Xi Jinping.
Este sentimiento se sumaba a la euforia tecnológica que llevó a Wall Street a cerrar el martes en máximos históricos. El impulso provino de las noticias de Nvidia, que anunció 500.000 millones de dólares en pedidos para sus chips de inteligencia artificial, y de Microsoft, que alcanzó un acuerdo para reestructurar OpenAI.
La expectación es máxima de cara a la publicación, esta misma tarde, de los resultados de los “siete magníficos” (Microsoft, Alphabet y Meta, entre ellos), de los que se esperan cifras sólidas.
En el ámbito empresarial español, continuaba el goteo de resultados.
Banco Santander subía ligeramente tras anunciar un aumento del 7,8% en su beneficio del tercer trimestre gracias a mayores comisiones e ingresos y menores provisiones. Por su parte, Naturgy apenas registraba cambios tras reiterar sus previsiones para 2025.
Los analistas de Bankinter resumían así el momento del mercado en su canal de Telegram: “La Fed decidirá la sesión, aunque las compañías americanas grandes que publican también influirán mucho: Microsoft, Starbucks, Alphabet, Meta, Ebay…”
“Por eso, será una sesión más de tarde que de mañana. Mañana europea algo desorientada, aunque es probable que evolucione desde débil hasta mejor. Y el desenlace de la tarde no debería ser malo porque la Fed bajará tipos y se mostrará más dovish/suave, tal vez incluso aclarando algo sobre su balance, aunque esto último es apostar a ciegas.”
Ante este contexto, a las 0805 GMT del miércoles el selectivo bursátil español IBEX 35 caía 31,30 puntos, un 0,19%, hasta 16.055,70 puntos, tras acabar en la víspera en un máximo histórico de cierre de 16.087 puntos, mientras que el índice de grandes valores europeos FTSE Eurofirst 300 retrocedía un 0,05%.
En el sector bancario, Santander subía un 0,94%, BBVA se anotaba un 0,06%, Caixabank avanzaba un 0,16%, Sabadell caía un 0,22%, Bankinter se revalorizaba un 0,23% y Unicaja Banco perdía un 0,34%.
Entre los grandes valores no financieros, Telefónica retrocedía un 0,50%, Inditex cedía un 0,85%, Iberdrola se dejaba un 0,17%, Cellnex caía un 0,28% y la petrolera Repsol subía un 0,16%.
Fuera del IBEX, destacaba el alza de Vidrala, tras reiterar sus proyecciones de generación de ebitda, y la caída de Ence, que anunció pérdidas de 15 millones.
(Información de Tomás Cobos; editado por Benjamín Mejías Valencia)











