PEKÍN, 4 nov (Reuters) -El presidente chino, Xi Jinping, trató el martes de ampliar la inversión mutua con Rusia y afirmó el compromiso de Pekín de impulsar los lazos pese a las “turbulentas” condiciones externas, informaron los medios estatales chinos.
Xi se reunió en Pekín con el primer ministro ruso, Mijaíl Mishustin, en el Gran Salón del Pueblo, un día después de que el primer ministro chino, Li Qiang, mantuviera un encuentro con Mishustin en Hangzhou, en el que Li afirmó que China quería reforzar la cooperación con Rusia y defender los intereses de seguridad compartidos.
El Kremlin ha destacado la importancia de la visita de Mishustin en un momento en que Rusia está sometida a importantes sanciones occidentales por su guerra en Ucrania y busca frenar una reciente ralentización del comercio con China.
“Las relaciones entre China y Rusia han mantenido el rumbo hacia un desarrollo de mayor nivel y calidad, avanzando con firmeza a pesar de las turbulentas condiciones externas”, dijo Xi a Mishustin, según la cadena estatal CCTV.
“Salvaguardar, consolidar y desarrollar las relaciones entre China y Rusia es una opción estratégica para ambas partes”, afirmó Xi.
Destacó sectores como la energía, la agricultura, la industria aeroespacial, la economía digital y el desarrollo ecológico, en los que los dos países podrían avanzar en la cooperación y fomentar nuevos motores de crecimiento.
Mishustin afirmó que es importante que ambas partes sigan creando condiciones favorables para atraer inversiones mutuas y apoyar proyectos conjuntos, según la agencia rusa de noticias TASS.
Xi y el presidente ruso, Vladimir Putin, firmaron una asociación “sin límites” en febrero de 2022, días antes de que Putin enviara decenas de miles de soldados a Ucrania.
Desde entonces, Rusia ha recurrido a China para amortiguar el impacto de las sanciones, destacando un comercio récord, el aumento de las liquidaciones en yuanes y la profundización de la cooperación energética.
Sin embargo, el comercio bilateral ha disminuido en los últimos meses, en un momento en que China se enfrenta a la creciente presión de Estados Unidos sobre el comercio y la tecnología.
Las grandes petroleras estatales chinas suspendieron sus compras de petróleo ruso transportado por mar tras las sanciones impuestas por Estados Unidos a Rosneft y Lukoil, las dos mayores petroleras de Moscú, según informó Reuters el mes pasado.
En un comunicado conjunto publicado el martes en la página web del Gobierno ruso, ambos países acordaron “reforzar la cooperación en todas las esferas y responder adecuadamente a los desafíos externos”.
Rusia también reafirmó su adhesión al principio de “una sola China” y su oposición a la “independencia de Taiwán”.
China considera Taiwán, gobernado democráticamente, parte de su territorio. El Gobierno de Taiwán rechaza la reivindicación de Pekín y afirma que solo el pueblo de la isla puede decidir su futuro.
(Información de Liz Lee y Ethan Wang, y Lidia Kelly en Melbourne; edición de Christopher Cushing y Kate Mayberry; edición en español de Paula Villalba)











