Por Max Hunder
5 mar (Reuters) – Las fuerzas armadas de la OTAN no están preparadas para una guerra moderna de drones, advirtió el comandante militar a cargo de los sistemas de drones de Ucrania, tres años después del inicio de una guerra con Rusia en la que ambas partes están tratando de obtener una ventaja tecnológica.
Kiev se esfuerza por ir por delante del enemigo, empleando inteligencia artificial, desplegando más drones terrestres y probando láseres para derribar drones rusos, dijo el coronel Vadim Sukharevskyi, jefe de las Fuerzas de Sistemas de Drones de Ucrania.
En declaraciones en una oficina recién equipada para las recién fundadas Fuerzas de Sistemas de Drones, cuya ubicación se pidió a Reuters que no revelara, Sukharevskyi expuso los saltos y los límites en los que la guerra con drones había avanzado desde el comienzo de la invasión en 2022, y las formas en las que ponía patas arriba las doctrinas de guerra establecidas.
“Por lo que veo y oigo, ni un solo ejército de la OTAN está preparado para resistir la cascada de drones”, dijo Sukharevskyi a Reuters en una entrevista reciente.
Afirmó que la OTAN debería reconocer la ventaja económica de los drones, cuya construcción suele costar mucho menos que el armamento convencional necesario para derribarlos.
“Son matemáticas elementales: ¿cuánto cuesta un misil que derriba un (dron) Shahed (ruso) y cuánto cuesta desplegar un barco, un avión y un sistema de defensa aérea para dispararle?”
Los drones de largo alcance pueden costar varios miles de dólares para los modelos de señuelo más básicos, aunque se calcula que los drones de ataque Shahed cuestan decenas de miles. Los misiles interceptores de defensa antiaérea suelen tener un precio de seis o siete cifras en dólares estadounidenses y muchos países solo tienen existencias limitadas, por lo que su uso resulta muy poco rentable.
Los comentarios de Sukharevskyi se producen en un momento en que algunos miembros de la OTAN en Europa están aumentando el gasto en defensa para prepararse para la guerra en caso de que el conflicto ucraniano se prolongue o se agrave. Estos esfuerzos se han intensificado ante el debilitamiento del apoyo estadounidense a Ucrania y Europa.
Desde que Rusia invadió Ucrania en 2022, el uso de drones ha aumentado enormemente.
Ucrania dice que fabricó 2,2 millones de pequeños drones de visión en primera persona (FPV, por sus siglas en inglés) y 100.000 más grandes y de largo alcance en 2024. Anteriormente, Rusia había estimado que fabricaría 1,4 millones de drones FPV en el mismo año.
“Ahora mismo, incluso el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania dice que más del 60% de los objetivos son destruidos por drones”, dijo Sukharevskyi.
“La única cuestión es cómo evolucionará la táctica de su uso y, a continuación, el aspecto tecnológico.”
(Información de Max Hunder; edición de Mike Collett-White y Sharon Singleton; edición en español de Mireia Merino)