BUENOS AIRES, 7 abr (Reuters) -La procesadora argentina Vicentin dijo que su decisión de suspender la actividad en sus fábricas de aceite y harina de soja ha tenido un “impacto directo” en su capacidad de pago de los salarios de marzo, según un comunicado interno fechado el domingo, al cual Reuters tuvo acceso el lunes.
Vicentin, una importante exportadora de aceite y harina de soja local en concurso de acreedores, tras declarar un ‘default’ por más de 1.000 millones de dólares en el 2019, anunció el sábado que cerraba la actividad de sus fábricas en medio de dificultades para llegar a un acuerdo con quienes les debe.
Argentina es el principal exportador mundial de aceite y harina de soja.
“Decisiones judiciales recientes (…) han agravado la incertidumbre entre nuestros clientes, quienes, por este motivo” han cesado de alquilar nuestras instalaciones de molienda, dijo Vicentin en su memo interno, haciendo referencia a la decisión de la Justicia de la provincia de Santa Fe de rechazó un acuerdo entre la empresa y parte de sus acreedores.
“Esto ha tenido un impacto directo en nuestras operaciones y, lamentablemente, (…) ahora también el pago de los salarios correspondientes al mes de marzo”, agregó la compañía.
El mes pasado, los dos principales sindicatos de trabajadores de plantas de aceite vegetal de Argentina anunciaron una huelga nacional debido a salarios atrasados en Vicentin. La medida fue suspendida tras una orden del Gobierno nacional y la compañía terminó abonando todos los sueldos.
Reuters se comunicó con el sindicato aceitero SOEA, el más importante del país, y su secretario gremial Martín Morales dijo que Vicentin tenía hasta el día de hoy para pagar los sueldos de marzo.
“Mañana (martes) si hay incumplimiento seguramente se tomará una medida (de fuerza), en principio en Vicentin. Después iremos analizando”, dijo Morales. “Es complicada la situación”, agregó.
(Reporte de Maximilian Heath; Editado por Walter Bianchi)
