MILÁN (Reuters) – La policía italiana informó el martes que había detenido a un ciudadano chino por presunta explotación laboral y cerrado un taller en la zona de Milán que producía artículos para la industria de la moda.
Se están llevando a cabo comprobaciones sobre los productos de ropa de marca encontrados en el taller, dijo la policía, sin revelar de qué marcas se trataba.
El anuncio se produjo pocos días después de que una unidad de la marca de moda Valentino fuera puesta bajo administración judicial por abusos a los trabajadores dentro de su cadena de suministro, uno de una serie de casos que han manchado la imagen de las marcas de lujo italianas.
En este último caso, la policía de la unidad de protección laboral de Milán informó que había cerrado el taller en los suburbios del noroeste de Milán el 13 de mayo.
La policía identificó a 10 trabajadores chinos víctimas de explotación. Seis de ellos trabajaban en negro, sin estar debidamente registrados, y cinco eran también inmigrantes ilegales.
El personal era obligado a trabajar hasta 90 horas semanales, siete días a la semana, y cobraba 4 euros (4,50 dólares) la hora, informaron los Carabinieri en un comunicado.
“Los trabajadores dormían en cuartos habilitados ilegalmente en el interior de la fábrica, que parecían una especie de dormitorios con terribles condiciones higiénicas y sanitarias”, señaló la nota.
La investigación policial se inició cuando un trabajador denunció a su patrón por romperle la mano, causándole lesiones que requirieron 45 días de tratamiento, después de que éste le reclamara 10.000 euros en salarios impagados.
Italia alberga miles de pequeños fabricantes que representan entre el 50% y el 55% de la producción mundial de artículos de lujo, según cálculos de la consultora Bain.
Las investigaciones de los magistrados italianos han sacado a la luz en los últimos años la explotación generalizada de los trabajadores en la cadena de suministro de la moda y el lujo.
(Reporte de Emilio Parodi; Editado en español por Natalia Ramos)