Por Tom Polansek y Leah Douglas
15 ago (Reuters) -El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) destinará hasta 750 millones de dólares para construir una planta de producción de moscas estériles en Texas para combatir la plaga del gusano barrenador del Nuevo Mundo, dijo el viernes la secretaria de Agricultura, Brooke Rollins.
El plan pone de manifiesto la creciente preocupación por el riesgo de que el gusano barrenador, una mosca parásita que se come vivo al ganado y a la fauna salvaje, infeste a la cabaña estadounidense después de que la plaga se desplazó hacia el norte, desde México hacia la frontera con Estados Unidos.
Un brote podría elevar aún más los precios récord de la carne de vacuno en Estados Unidos al mantener más animales fuera del suministro.
En Texas, el mayor estado productor de carne del país, los ganaderos prevén el regreso del gusano barrenador por primera vez en décadas. Estados Unidos eliminó esta plaga en el siglo XX lanzando desde aviones cajas llenas de moscas estériles.
La nueva planta de producción de Edinburg, Texas, se ubicará junto a una instalación de dispersión de moscas estériles ya anunciada en la base aérea de Moore y tendrá capacidad para producir 300 millones de moscas estériles del gusano barrenador a la semana, según Rollins. Las moscas estériles reducen la población de apareamiento de las moscas silvestres.
“Es un movimiento táctico que garantiza que estamos preparados y no sólo reaccionamos”, dijo Rollins en una rueda de prensa junto al gobernador de Texas, Greg Abbott.
Rollins no dijo cuándo abrirá la planta y el USDA no respondió de inmediato a las preguntas sobre el calendario del proyecto. Rollins afirmó con anterioridad que la construcción de una instalación de este tipo llevaría entre dos y tres años.
El USDA gastará otros 100 millones de dólares en tecnologías para combatir el gusano barrenador del ganado mientras se construye la instalación, dijo Rollins.
Washington detuvo las importaciones de ganado de México en julio para mantener alejada la plaga. También invirtió millones en la creación de una nueva planta de producción de moscas estériles en Metapa (México), pero tardará cerca de un año en entrar en funcionamiento.
En Panamá, una instalación cría hasta 100 millones de moscas estériles del gusano barrenador por semana. El USDA calcula que es necesario liberar 500 millones de moscas semanales para hacer retroceder a la mosca hacia el sur de América Latina.
“Todos los estadounidenses deberían estar preocupados, pero sin duda son Texas y nuestros estados fronterizos y productores de ganado los que están en primera línea todos los días”, afirmó Rollins.
(Editado en español por Juana Casas y Carlos Serrano)