Por Nidal al-Mughrabi y Lili Bayer
EL CAIRO/JERUSALÉN, 21 ago (Reuters) -El ejército israelí mantuvo su presión sobre la Ciudad de Gaza con intensos bombardeos durante la noche, según los residentes, antes de la reunión el jueves entre el primer ministro, Benjamin Netanyahu, y sus ministros sobre los planes para tomar la localidad más grande del enclave.
Un día antes, el ejército llamó a filas a 60.000 reservistas, señal de que el gobierno seguía adelante con el plan pese a la condena internacional. No obstante, un oficial dijo que la mayoría de los reservistas no entrará en combate y que la estrategia no está ultimada del todo aún.
También es probable que la llamada a filas de decenas de miles de reservistas lleve semanas, lo que dará tiempo a los mediadores a intentar salvar las distancias en torno a una nueva propuesta de alto el fuego temporal que Hamás ha aceptado, pero a la que el gobierno israelí no ha respondido de manera oficial.
La propuesta exige un alto el fuego de 60 días y la liberación de 10 rehenes vivos retenidos en Gaza por milicianos de Hamás y de 18 cadáveres. A su vez, Israel liberaría a unos 200 prisioneros palestinos en su poder desde hace mucho tiempo.
El gobierno israelí ha reiterado que los 50 rehenes en poder de milicianos de Gaza deben ser liberados de inmediato. Las autoridades israelíes creen que una veintena sigue con vida.
Como muestra de la creciente desesperación por la situación en Gaza, los residentes protagonizaron el jueves una inusual manifestación de protesta contra la guerra.
Con pancartas en las que se leía “Salvemos Gaza, basta ya” y “Gaza está muriendo por la matanza, el hambre y la opresión”, cientos de personas se concentraron en la Ciudad de Gaza en una marcha organizada por varias uniones civiles.
“Se trata de un mensaje claro: se acabaron las palabras y llegó el momento de pasar a la acción para detener las operaciones militares, poner fin al genocidio contra nuestro pueblo y detener las masacres que tienen lugar a diario”, dijo el periodista palestino Tawfik Abu Jarad durante la protesta.
El Ministerio de Salud gazatí dijo que al menos 70 personas perecieron por fuego israelí en el enclave en las últimas 24 horas, entre ellas ocho personas en una casa del suburbio de Sabra, en la Ciudad de Gaza.
TOMA DE LA CIUDAD DE GAZA
El plan para tomar la Ciudad de Gaza fue aprobado este mes por el gabinete de seguridad, presidido por Netanyahu, a pesar de que muchos de los aliados más cercanos de Israel han instado al Gobierno a reconsiderarlo.
Netanyahu celebrará una reunión durante el día para aprobar los planes operativos, según una fuente cercana al primer ministro. Su intención es lanzar la operación lo antes posible, lo que incluiría la emisión de advertencias a los residentes para que abandonen la Ciudad de Gaza, añadió la fuente.
Pese a que el ejército está empezando sus preparativos para lanzar el asalto a la Ciudad de Gaza, funcionarios israelíes indicaron que hay tiempo para alcanzar un alto el fuego.
Netanyahu está presionado por algunos miembros de extrema derecha de su coalición para rechazar un alto el fuego temporal y continuar con la guerra y la anexión del territorio.
En la Ciudad de Gaza, miles de palestinos abandonaron sus hogares al intensificar las fuerzas israelíes los bombardeos sobre los barrios de Sabra y Tuffah. Algunas familias se fueron a refugios de la costa, mientras que otras se trasladaron al centro y al sur del enclave, según sus residentes.
“Nos enfrentamos a una situación muy amarga: morir en casa o marcharnos y morir en otro lugar; mientras continúe esta guerra, la supervivencia es incierta”, dijo Rabah Abu Elias, de 67 años, padre de siete hijos.
“En las noticias hablan de una posible tregua, sobre el terreno solo oímos explosiones y vemos muertes. Abandonar o no la ciudad de Gaza no es una decisión fácil de tomar”, dijo a Reuters por teléfono.
(Reporte adicional de Ebrahim Hajjaj en Gaza; editado en español por Patrycja Dobrowolska y Carlos Serrano)