Por Ann Saphir
26 sep (Reuters) -Un economista cuya investigación proporcionó una base para el argumento del gobernador de la Fed, Stephen Miran, de que la represión de la inmigración del presidente Donald Trump ralentizará la inflación al reducir la demanda por vivienda, dice que el nuevo banquero central está exagerando el impacto.
Después de que Reuters consultó a la Fed sobre los números de Miran, este actualizó su discurso del lunes para aclarar que la estimación se basa en un “gran shock de inmigración cuasi aleatorio”, una referencia a los refugiados cubanos que repentinamente buscaron vivienda en el área de Miami hace 45 años.
Un portavoz de la Reserva Federal no respondió inmediatamente a una petición de comentarios.
El trabajo de Albert Saiz, economista del MIT que lleva décadas estudiando la inmigración y la vivienda, muestra que una afluencia de inmigración equivalente al 1% de la población de una ciudad provoca un aumento de los alquileres de aproximadamente el 1% en esa ciudad.
Otros investigadores también han encontrado este tipo de impactos -algunos mayores, otros menores- y Saiz dijo a Reuters que no discute la idea de que invertir la afluencia tenderá a reducir los alquileres.
Miran, en su discurso de debut como nuevo responsable de la política monetaria de la Reserva Federal, se aferró a esa idea, pero no siguió la fórmula de Saiz: eligió como denominador una estimación de la población nacional de inquilinos de unos 100 millones de personas, en lugar de la población total estadounidense, mucho mayor, de 340 millones.
El resultado fue un impacto sobre la inflación tres veces mayor que el obtenido con la fórmula de Saiz.
“Si se hiciera el cálculo con las magnitudes correctas, se obtendría 1 dividido por 340 millones, lo que equivaldría a un 0,29% anual”, dijo Saiz en una entrevista.
“Obviamente, el crecimiento de la población influye en el precio de la vivienda, pero la magnitud no es lo bastante grande como para justificar cambios importantes en la política monetaria”, agregó.
Miran argumenta que la inmigración neta cero bajo las nuevas políticas fronterizas de Trump implica una inflación del alquiler un punto porcentual más baja al año.
Se basa en el artículo de Saiz de 2003 que analizaba cómo una repentina afluencia de cubanos a Miami en 1980 -el llamado éxodo del Mariel- afectó a los precios de los alquileres en esa ciudad. En ese documento se analizaba en qué medida esa afluencia había ampliado la población de inquilinos de Miami.
Un segundo trabajo de Saiz en 2007 -y gran parte de la literatura internacional posterior sobre el tema, aunque no toda- sugiere un efecto más limitado.
Miran estima que la inflación de los alquileres en el índice de precios al consumo caerá 2 puntos porcentuales hasta 2027, igual a su valoración del efecto de la inflación de los alquileres basada en su lectura de Saiz.
La caída haría descender la inflación total, según la medida que utiliza la Reserva Federal -el índice de gasto de consumo personal a 12 meses-, 0,4 puntos porcentuales a principios de 2028, lo que justificaría una reducción de medio punto en la tasa de interés oficial de la Fed, dijo en su discurso.
“Se podría calificar de optimista esta opinión sobre la inflación de los alquileres”, dijo Miran. “Sin embargo, creo que los pronosticadores han infravalorado el impacto significativo de la política de inmigración en la inflación de los alquileres, tanto al alza como, ahora, a la baja”.
En general, Miran dice que la política monetaria de la Reserva Federal es 2 puntos porcentuales demasiado alta, una opinión que no cuenta con ningún otro partidario entre los otros 18 responsables de la política monetaria de la Fed.
(Reporte de Ann Saphir; edición de Dan Burns y Anna Driver. Editado en español por Natalia Ramos)