Por Leika Kihara y Makiko Yamazaki
TOKIO, 21 oct (Reuters) -El nombramiento de Satsuki Katayama como próxima ministra de Finanzas de Japón podría dar a los mercados motivos para reconsiderar la presión a la baja sobre el yen, pero también podría ayudar a la nueva dirigente del país a encontrar nuevas formas de financiar planes audaces de estímulo económico.
La nueva primera ministra japonesa, Sanae Takaichi, podría nombrar a Katayama ministra de Finanzas, según informaron el martes medios de comunicación locales, lo que la convertiría en la primera mujer en ocupar este cargo.
La noticia hizo caer brevemente al dólar hasta los 150,50 yenes, antes de recuperar las pérdidas y situarse por encima de los 151 yenes.
En una entrevista concedida a Reuters en marzo, Katayama, una veterana parlamentaria de la Cámara Alta, de 66 años y exburócrata del Ministerio de Finanzas, dijo que los fundamentales económicos de Japón indican que el valor real del yen está más cerca de los 120 o 130 por dólar.
Estos comentarios se produjeron cuando el yen había caído a alrededor de 150 frente al dólar, ante las expectativas del mercado de que el Banco de Japón frenara el endurecimiento monetario. El yen cotiza actualmente en torno a 151 por dólar.
“Dados sus comentarios anteriores, parece que Katayama está a favor de revertir la debilidad del yen. Es posible que los mercados lo hayan considerado similar a las opiniones del secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent”, afirmó Akira Moroga, estratega jefe de mercado de Aozora Bank.
Katayama no quiso hacer comentarios el martes.
Takaichi fue elegida el martes primera ministra de Japón, lo que supuso una ruptura simbólica del techo de cristal en un país en el que los hombres siguen ostentando la mayor parte del poder.
El yen y los rendimientos de los bonos caían tras la votación por las expectativas del mercado de que Takaichi, conocida por ser defensora de una política fiscal y monetaria expansiva, realizaría un gran gasto y se opondría a una pronta subida de tipos del Banco de Japón.
FRANCA, DECIDIDA, CONOCEDORA DE LA SITUACIÓN
Katayama, antigua burócrata del Ministerio de Finanzas muy versada en asuntos fiscales, tiene un don para la diplomacia monetaria y es amiga de antiguos y actuales ejecutivos del ministerio que supervisa la política de tipos de cambio.
Es conocida por su franqueza y su capacidad para tomar decisiones, lo que contrasta con el actual ministro de Finanzas, Katsunobu Kato, que rara vez se sale del guión y mantiene un perfil bajo.
En la entrevista de marzo, Katayama había dicho que el Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, no quería una excesiva debilidad del yen frente al dólar.
De hecho, Bessent dijo la semana pasada que el yen encontraría su propio nivel si el banco central sigue una “política monetaria adecuada”, su último ataque al lento ritmo de subidas de tipos del Banco de Japón.
El nombramiento de Katayama se produciría en un momento de encarecimiento de la vida en Japón, achacado en parte a la subida de los precios de importación provocada por la debilidad del yen. Estos factores han perjudicado a los hogares y a los índices de aprobación del partido gobernante.
(Información de Leika Kihara y Makiko Yamazaki; información adicional de Yoshifumi Takemoto y Takahiko Wada; edición de Sam Holmes; edición en español de Jorge Ollero Castela)