Por Luis Jaime Acosta
BOGOTÁ, 19 nov (Reuters) -Las Fuerzas Militares de Colombia continuarán con los bombardeos para contrarrestar la expansión de los grupos armados ilegales y someterlos, pese a la reciente muerte de al menos 12 niños y adolescentes en tres ataques aéreos contra una disidencia de las FARC, dijo el miércoles el ministro de Defensa, Pedro Sánchez.
La Defensora del Pueblo, Iris Marín, encargada de proteger los derechos humanos, solicitó esta semana al presidente izquierdista Gustavo Petro suspender los bombardeos, después de los recientes ataques aéreos en los departamentos de Amazonas, Guaviare y Arauca. El mandatario pidió perdón a las madres de siete menores muertos en uno de los bombardeos.
El uso de los bombardeos fue un cambio en la estrategia de seguridad de Petro, quien los suspendió cuando asumió el cargo en 2022 y luego los restableció el año pasado con la condición de que no causaran víctimas entre niños y adolescentes reclutados por las guerrillas y las bandas criminales que se financian del narcotráfico y la minería ilegal.
“El empleo de todas las capacidades legítimas que tiene el Estado, que incluyen los bombardeos, se va a continuar”, dijo Sánchez, un general retirado de la Fuerza Aeroespacial Colombiana, en una entrevista con Reuters. “Se atacó un blanco legítimo, con medios totalmente legales, acorde a la Constitución y a la ley.”
Los grupos armados ilegales son los primeros responsables de las muertes de menores por haberlos reclutado, aseguró el ministro de Defensa. “No atacamos menores, atacamos fue un objetivo totalmente legítimo. Hay que tomar decisiones que consideramos las más correctas, aunque sean las más difíciles”, insistió.
Petro, quien prometió poner fin al conflicto armado de seis décadas que ha dejado más de 450.000 muertos, también cambió el año pasado su plan ante los escasos avances en los diálogos con los grupos armados y ordenó una ofensiva militar en el suroeste del país para desalojar a una disidencia de las FARC, que rechazó un acuerdo de paz de 2016. Sin embargo, la estrategia que incluye inversión social no ha logrado los cambios esperados.
Los grupos armados ilegales, principalmente las disidencias de las antiguas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), reclutan niños —la mayoría de forma forzada— y los usan para evitar ataques militares y proteger a sus líderes y sus campamentos, según organizaciones de derechos humanos.
DISIDENCIA FARC AMENAZA CON “JUICIO REVOLUCIONARIO”
Al menos 625 niñas, niños y adolescentes fueron reclutados durante 2024, mientras que entre enero y octubre de este año se registraron 162 casos, según la Defensoría del Pueblo.
El máximo líder de la principal disidencia de las FARC, conocido por su nombre de guerra como Iván Mordisco, anunció un juicio revolucionario contra los responsables de los bombardeos a sus campamentos en la selva, lo que Sánchez calificó como una “amenaza muy grave” que justifica el uso del poder aéreo.
El juicio revolucionario es un proceso ilegal en el que una persona es acusada de un delito por la guerrilla, que la puede condenar a muerte, una práctica prohibida por las leyes y que podría empoderar a los criminales, sostuvo el ministro.
Los ataques aéreos han sido históricamente un arma letal del Estado contra los grupos armados. Después de las muertes en bombardeos de varios de sus influyentes líderes, las FARC iniciaron un diálogo que concluyó con la firma del acuerdo de paz y la desmovilización de 13.000 combatientes.
El reciente acuerdo por 3.100 millones de euros con la empresa sueca Saab para la compra de 17 aviones Gripen E/F y reemplazar la vieja flota de aviones israelíes Kfir adquiridos en la década de 1980, se logró después de un proceso transparente, dijo Sánchez, negando irregularidades de corrupción.
Algunos líderes políticos de la oposición y expertos militares denunciaron esta semana un posible sobrecosto en la operación.
Sánchez dijo que la cooperación militar con Estados Unidos “está muy fuerte” y el intercambio de información de inteligencia continúa para combatir el narcotráfico, con la condición de que no sea usada para ataques letales a embarcaciones supuestamente involucradas en el tráfico de drogas.
Los bombardeos a los barcos desataron un cruce de palabras entre Petro y el presidente estadounidense, Donald Trump, en medio del que el mandatario colombiano amenazó la semana pasada con cancelar el intercambio de inteligencia.
(Reporte de Luis Jaime Acosta. Editado por Nelson Bocanegra)















