QUITO, 20 dic (Reuters) – Una expedición de expertos al volcán Wolf en las Islas Galápagos, donde habita la última población de iguanas terrestres rosadas, permitió descubrir crías y ejemplares juveniles de esta especie por primera vez desde su descubrimiento hace algunas décadas, dijo el martes el Parque Nacional Galápagos.
Nativa sólo de las laderas del volcán Wolf en la isla Isabela, la más grande del archipiélago ecuatoriano, la iguana rosada se considera en peligro crítico y solo quedarían varios cientos de ejemplares, según las estimaciones.
“Este descubrimiento es un avance significativo que permite identificar un camino para salvar a la iguana rosada”, dijo el director del Parque Nacional Galápagos, Danny Rueda, en un comunicado.
En los últimos meses, el equipo de investigadores documentó sitios de anidación y detectó tanto nidos activos como neonatos e iguanas rosadas juveniles de diferentes edades.
Las iguanas rosadas fueron descubiertas por primera vez por los guardaparques ecuatorianos en 1986. Sin embargo, los científicos tardaron años en reconocerla como una especie separada de las demás en la isla.
Su población está amenazada por especies introducidas en la zona de su hábitat, particularmente roedores, dijo el Parque Nacional Galápagos.
“Conocer todos los aspectos que haga vulnerable su existencia nos permitirá ejecutar acciones oportunas, principalmente en contra de especies invasoras y así evitar que se interrumpan los ciclos naturales de estos frágiles ecosistemas”, explicó Rueda.
Las Islas Galápagos con su fauna única fueron fundamentales para la teoría de la evolución del científico británico Charles Darwin. Es el hogar de muchas especies que no se encuentran en otros lugares, como tortugas gigantes, cormoranes no voladores e iguanas marinas y terrestres, incluida la rosada.
El volcán Wolf es uno de los lugares más remotos monitorizados por el parque nacional, que instaló una estación de investigación y monitoreo en su base.
(Reporte de Alexandra Valencia. Editado por Javier Leira)