Por Katya Golubkova y Makiko Yamazaki
TOKIO, 5 sep (Reuters) – Los países no deben intervenir en los acuerdos de forma arbitraria por una cuestión de principios, dijo Taro Kono, ministro japonés y candidato a primer ministro, al ser preguntado por la noticia de que Estados Unidos se dispone a bloquear la adquisición de U.S. Steel por parte de Nippon Steel.
El miércoles, algunas fuentes informaron a Reuters de que la Casa Blanca estaba a punto de anunciar que el presidente estadounidense, Joe Biden, bloquearía la oferta de 15.000 millones de dólares de la empresa japonesa por U.S. Steel alegando riesgos para la seguridad nacional.
El acuerdo se enfrenta a una creciente oposición política de los dos partidos en el contexto de las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos y un poderoso sindicato se opone a la adquisición de U.S. Steel, con sede en Pensilvania, un estado decisivo tanto para demócratas como para republicanos.
“Hay ocasiones en las que el libre mercado se ve superado por asuntos de seguridad nacional, medio ambiente y derechos laborales, pero no estoy seguro de que la adquisición de U.S. Steel sea comparable a éstas”, dijo el jueves Kono, ministro japonés de Asuntos Digitales que se presenta este mes a las elecciones por el liderazgo del gobernante Partido Liberal Democrático (PLD) para sustituir al actual primer ministro, Fumio Kishida.
Las adquisiciones pueden beneficiar a empresas y regiones, afirmó.
El control parlamentario del PLD significa que su líder se convierte en el primer ministro de Japón.
“Quizá sean las elecciones presidenciales y todo el mundo quiera el voto de los sindicatos, pero espero que el mercado no se vea distorsionado por una situación así”.
La operación, que ambas empresas esperan cerrar a finales de este año, es especialmente delicada, ya que Estados Unidos es el aliado más cercano de Japón y éste, a su vez, es el mayor inversor extranjero en Estados Unidos.
“La relación entre EEUU y Japón es más profunda, más rica y más fuerte que cualquier transacción comercial”, dijo el jueves por separado a la prensa el embajador de Estados Unidos en Japón, Rahm Emanuel.
REACCIÓN DEL MERCADO
Las acciones de Nippon Steel cerraron con una caída del 0,4% en Tokio, después de haber subido tras conocerse la noticia a primera hora del día, superando al índice Nikkei, que bajó un 1%. Las acciones de U.S. Steel cerraron el miércoles con una caída del 17,5%.
En una carta de la que no se ha informado previamente, el Comité de Inversiones Extranjeras en Estados Unidos (CFIUS, por sus siglas en inglés) advirtió el sábado a la empresa japonesa de que el acuerdo perjudicaría a la producción de acero estadounidense y disminuiría la probabilidad de que U.S. Steel siguiera buscando agresivamente remedios comerciales, según dijeron a Reuters por separado personas familiarizadas con el asunto.
El Consejo Empresarial Japón-EEUU, un grupo industrial en Washington D.C. que representa a las principales empresas japonesas, dijo en un comunicado el jueves que estaba seriamente preocupado por las informaciones de que Biden estaba bloqueando la venta.
“Estamos muy alarmados por cualquier intento de politizar el proceso de revisión CFIUS, (…) que debe llevarse a cabo objetivamente sobre la base de normas y procesos justos”, dijo el grupo.
Los tres megabancos japoneses —Sumitomo Mitsui Financial Group, Mitsubishi UFJ Financial Group y Mizuho Financial Group— tenían previsto prestar a Nippon Steel un total de 16.000 millones de dólares para la operación.
A Nippon Steel le interesa el acuerdo con U.S. Steel, ya que su mercado nacional se enfrenta a importaciones baratas de China, el mayor productor mundial de acero.
(1 dólar = 143,6500 yenes)
(Información de Katya Golubkova, Junko Fujita, Kevin Buckland, Makiko Yamazaki, Kantaro Komiya y Tim Kelly en Tokio; edición de Stephen Coates y Muralikumar Anantharaman; editado en español por Anxo Fariñas Torres)












