Por Raul Cortes y Kylie Madry
CIUDAD DE MÉXICO, 5 dic (Reuters) -La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, dijo el jueves que si hay deportaciones desde Estados Unidos, cuando Donald Trump asuma el poder en enero, espera llegar a un acuerdo con su Gobierno para que las autoridades estadounidenses envíen a los migrantes deportados directamente de regreso a sus países de origen.
El mandatario electo republicano ha amenazado con deportar masivamente a migrantes ilegales, reforzar la seguridad en su frontera con México e imponer medidas proteccionistas en materia comercial si el país latinoamericano no controla los grandes flujos de personas que buscan llegar a Estados Unidos y el tráfico de drogas, principalmente fentanilo.
“Esperamos tener un acuerdo con la administración Trump, en caso de que haya estas deportaciones, para que ellos también envíen a sus países de origen a las personas que vienen de otros países”, dijo Sheinbaum en su conferencia de prensa diaria.
La presidenta recordó que actualmente hay un convenio con el gobierno del presidente saliente Joe Biden por el cual migrantes de varias nacionalidades son enviados directamente por vía aérea a sus países de origen desde Estados Unidos y otro acuerdo para que México también los regrese a esas naciones.
En los últimos años, México ha jugado un papel clave en la implementación de las políticas migratorias de Estados Unidos, aceptando migrantes de países con los que su vecino del norte tiene dificultades para retornar directamente, como Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela.
El equipo de transición de Trump ha discutido la posibilidad de deportar a los inmigrantes a lugares distintos de sus países de origen si esas naciones no los aceptan, dijeron a Reuters dos fuentes familiarizadas con el asunto.
Los posibles destinos podrían incluir Bahamas, Caicos, Granada, Islas Turcas y Panamá, dijo una de las fuentes, confirmando un informe de NBC News.
El Ministerio de Relaciones Exteriores panameño, en respuesta, expresó más tarde el jueves en un comunicado no haber recibido “ninguna comunicación oficial, ni oficiosa” sobre tal propuesta.
“A la luz del derecho internacional, no tenemos obligación de recibir deportados de otras nacionalidades que no sean la panameña”, agregó, al tiempo que expresó su deseo de mantener relaciones con Estados Unidos “siempre en el marco del respeto mutuo”.
Las autoridades de Bahamas informaron en un comunicado aparte que habían recibido una petición sobre el tema, pero que había sido “revisada y rechazada firmemente”. Los gobiernos de Islas Turcas y Caicos y Granada no respondieron de inmediato a solicitudes de comentarios.
A fines de octubre, el zar fronterizo de Trump, Tom Homan, dijo a Reuters que enviar inmigrantes a otros países, incluido México, sería una opción.
El equipo de transición de Trump no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
“NO ESTÁN SOLOS”
Sheinbaum ha dicho que su Gobierno está preparado para la potencial llegada masiva de compatriotas deportados desde Estados Unidos, a partir del 20 de enero cuando Trump asuma la presidencia, y ha expresado su rechazo al plan del republicano al destacar el importante papel que tienen los mexicanos en la economía estadounidense.
El canciller Juan Ramón de la Fuente estuvo el jueves en Estados Unidos, donde visitó los consulados en Oklahoma y Texas, y envío un mensaje de respaldo a los migrantes mexicanos que podrían ser deportados, en un contacto con medios de comunicación.
“No están solos, nuestra red de servicios consulares está fortaleciéndose y está preparándose para apoyarlos, para protegerlos ante cualquier eventualidad”, afirmó el funcionario, quien visitó también un centro de procesamiento de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por su sigla en inglés).
Sheinbaum ha dicho que la estrategia para enfrentar las posibles deportaciones incluye atender a los afectados en las sedes consulares mexicanas en Estados Unidos.
Al preguntársele si México recibirá a deportados de otras nacionalidades, De la Fuente respondió a secas: “Vamos a recibir a connacionales de México”.
(Reporte de Kylie Madry y Raúl Cortés Fernández; Reporte adicional de Élida Moreno en Ciudad de Panamá; Editado por Lizbeth Díaz y Adriana Barrera)
